Sayles: "El cine independiente no es cuestión de dinero"

El estadounidense John Sayles, que cerró ayer en Cannes la sección oficial a concurso con su película Limbo, trabaja como novelista, actor, guionista de sus filmes y de otros (ha escrito para Spielberg, Scorsese o Frankenheimer); pero, ante todo, es uno de los realizadores más independientes del panorama cinematográfico actual (lo es hasta del cine independiente americano al uso)."He tenido mucha suerte, porque tengo un pie en cada mundo. Soy guionista en Hollywood, de hecho soy uno de los pocos directores que consigue trabajar con otros realizadores sin problemas; pero también hago las películas que quiero. Cuando escribo para otros soy un simple técnico: les ayudo a contar lo que ellos quieren", dijo Sayles, que se presentó en Cannes con su aspecto habitual, más propio de un leñador que de uno de los grandes cineastas. "Hacer cine independiente no es una cuestión de dinero. No me importa de dónde vengan los fondos, lo importante es querer contar una historia. El medio da igual, puede ser un gran estudio, dos dentistas de Cleeveland o la tarjeta de crédito de mi madre. Lo esencial es la historia", agregó el autor de filmes como Passion Fish, Hombres armados o El secreto de la isla de las focas.

Apasionado por describir culturas diferentes en sus películas, Sayles se ha desplazado en esta ocasión a Alaska, porque considera que es uno de los últimos lugares del planeta donde todo es posible. "Antes de escribir el guión, voy al sitio donde transcurre el filme y hago un trabajo de reportero. Luego, durante la preproducción, vuelvo, no sólo para hacer localizaciones, sino para que los habitantes lean el guión y me digan lo que les resulta inverosímil", señaló sobre su forma de trabajo.

Por otra parte, la Federación Internacional de Prensa Cinematográfica dio a conocer ayer su premio a Emile Delauze por su película Peau neuve.