Países vecinos a Yugoslavia dicen que la UE carece de un plan de ayuda

El ministro de Exteriores de Alemania, Joschka Fischer, en calidad de representante de la presidencia de la Unión Europea (UE), y sus otros dos colegas de la troika comunitaria (Austria y Finlandia), se hicieron el jueves una primera composición de lugar de los graves problemas que sufren los países de los Balcanes, afectados por la oleada de decenas de miles de refugiados procedentes de Kosovo. Fischer calificó de "terribles" los informes que los ministros de Exteriores de ocho países vecinos a Yugoslavia (Bosnia-Herzegovina, Albania, Macedonia, Bulgaria, Rumania, Hungría, Croacia y Eslovenia) expusieron en una conferencia celebrada en Petersberg, en las cercanías de Bonn.La Unión Europea no tiene aún un plan conjunto de ayuda a los refugiados, ni un plan para su distribución territorial. Parte de los países afectados por el problema aprovecharon la conferencia del jueves para exponer las dificultades sociales y económicas con las que ya estaban lidiando y pedir ayuda suplementaria, a la vista de lo que se les está viniendo encima. Fischer manifestó que la UE debe interceder ante las instituciones financieras internacionales para que se alivie la situación en la balanza de pagos de Albania y Macedonia y se ayude a estos países a estabilizar su presupuesto.

Mientras, el ex canciller federal Helmut Schmidt aseguraba en una entrevista con el semanario L'Hebdo, que la participación alemana en la acción de la OTAN no está justificada y que, "guiada por Estados Unidos, Alemania había despreciado el derecho internacional y la Carta de Naciones Unidas". Schmidt calificó de "error" la intervención.

Ayuda española

Como avanzadilla de la ayuda que España piensa mandar a la región, el jueves salió de Alicante el primer avión con alimentos y pertrechos para los refugiados de Kosovo. Se trataba de un Hércules C-130 de la Fuerza Aérea española que transporta 10 toneladas de alimentos de primera necesidad, por un valor de 25 millones de pesetas. El vuelo fue organizado por la Agencia Española de Cooperación Internacional (AECI).El miércoles se puso en marcha un convoy de camiones con ayuda humanitaria fletado por la Cruz Roja y las distintas organizaciones no gubernamentales, a la vez que Cáritas española ha organizado campañas de recogida de ayuda para los refugiados.

La Comisión Española de Ayuda al Refugiado (CEAR), por su parte, ha enviado una carta a los ministerios de Asuntos Exteriores, de Interior y de Trabajo y Asuntos Sociales en la que solicita que organicen un programa de acogida y protección en España para los refugiados de Kosovo, tal como se hizo hace unos años con los damnificados por la guerra en Bosnia-Herzegovina.