Un barrendero descubre el cadáver de un hombre apuñalado

Un barrendero descubrió en la mañana de ayer, en la calle de San Emilio (distrito de Ciudad Lineal), el cadáver de Pedro Sancho Pérez, de 35 años. El hombre, según la primera versión policial, había muerto apuñalado. El hallazgo llegó a las 7.30, cuando el empleado del servicio de limpieza vio junto a un coche y un contenedor de basura el cuerpo del hombre cubierto por unas ramas.El cadáver presentaba cinco puñaladas en el pecho y varias en la espalda. El juez de guardia ordenó su traslado al Instituto Anatómico Forense para su autopsia. El caso recayó en el Grupo de Homicidios de la Brigada Provincial de Policía Judicial. El juez de guardia decretó el secreto de sumario.

El cuerpo fue hallado junto a un Ford Escort blanco con matrícula de Barcelona. El vehículo, que presentaba grandes manchas de sangre, fue llevado a dependencias policiales para su análisis. El dueño del coche indicó que había aparcado el coche a las diez menos cuarto de la noche del domingo. Luego no oyó nada raro. La policía sostiene que las ramas que cubrían el cadáver de Sancho Pérez habían sido sacadas del contenedor de basura, posiblemente con la intención de ocultar el mayor tiempo posible el cadáver.

Muerte de un ladrón

Por otra parte, un hombre murió ayer, a la una de la tarde, al caerse desde un cuarto piso del número 20 de la calle de Manuel Silvela, en el distrito de Chamberí. Las primeras investigaciones policiales apuntan a que el fallecido, Jesús L.S., de 30 años, pretendía entrar en una vivienda a robar. Para ello había escalado el patio interior del inmueble apoyándose en tendederos, tuberías y repisas. Al intentar alcanzar la vivienda del cuarto piso, una de las cuerdas del tendedero que le sustentaba se soltó y el hombre cayó al vacío. Al lugar de los hechos acudió una UVI móvil del Insalud, pero Jesús L.S. sufría heridas mortales. La policía descubrió que tenía una navaja en el bolsillo y las manos enfundadas en calcetines.