Manglano afirma que "nunca, nunca, nunca" habló de terrorismo con el presidente González

"No he despachado nunca, nunca, nunca con el presidente del Gobierno sobre temas de terrorismo", aseguró ayer el ex director del Cesid, Emilio Alonso Manglano, en el juicio del caso Marey. Aunque fue su negativa más rotunda, no fue la única. Negó que hubiera visto o autorizado algún sello de los GAL. Negó que despachara con el ex coronel Juan Alberto Perote sobre la nota de 28 de septiembre de 1983 que alertaba sobre la inminencia de acciones contra ETA en Francia. Y afirmó que "el Cesid había llegado a la tesis y conclusión definitiva de que no eran aceptables" tales acciones.

El teniente general Alonso Manglano, que mantuvo en su declaración un tono desafiante, negó que durante su mandato tuviera despachos semanales con el entonces presidente del Gobierno, Felipe González.Tras señalar que "nunca, nunca, nunca" habló con González sobre asuntos de terrorismo, añadió que sí tuvo con él "un par de despachos sobre temas de involución y seguridad exterior", en reuniones con más personas. Aunque en otro momento reconoció que "la tenaza terrorismo-involución" era una de las mayores preocupaciones del Gobierno y de la sociedad en los años 80.

La mayoría de las preguntas formuladas a Alonso Manglano estuvieron referidas a la llamada acta fundacional de los GAL de fecha 6 de julio de 1983 y la nota de despacho, de 28 de septiembre de 1983, en la que Perote alertaba del comienzo inminente de acciones contra etarras asentados en el sur de Francia.

El general aseguró que no tuvo noticia del acta fundacional hasta que se le preguntó por ese documento durante su declaración sumarial ante el juez Eduardo Móner en septiembre de 1995. Dijo que tal documento le "sorprende": "Primero, porque se encargue a un área que no es la encargada de terrorismo; segundo, porque es transcripción en parte de un manual de 1979; y tercero, porque no tiene sello de salida del Cesid". Y sobre esto último añadió: "Lo cual tiene su lógica: si el centro había decidido no hacer tales acciones, no tenía sentido su difusión. Era un estudio que hizo la Agrupación Operativa y ése es su valor".

Sobre otra nota, la que anuncia el inicio de acciones en Francia, Alonso Manglano declaró que a través del denominado índice de despacho se pudo comprobar que "en la casilla correspondiente a esa nota y a otras tres que están por encima" figuraba que no habían sido despachadas, es decir, que él no había hablado de ellas con Perote. "Si yo hubiera visto esta nota, hubiera generado las comprobaciones oportunas ¿está claro?", agregó. El ex coronel, sentado entre el público, no hizo el menor gesto durante la declaración de su antiguo jefe.

El ex responsable del Cesid dijo no saber si las acciones de guerra sucia que se produjeron inmediatamente después en Francia tenían relación con "lo que se decía en esa nota", entre otras cosas porque el centro jamás investigó a estos grupos terroristas.

"En el centro se había llegado a la conclusión definitiva de que no eran aceptables las acciones en Francia", respondió al abogado de la acusación Kepa Landa, después de que el presidente del tribunal reconviniera al ex jefe del Cesid para que hablase al letrado "con el debido respeto".

Según Alonso Manglano, nunca tuvo datos de los GAL o de otras bandas que empezaron a actuar en 1974. "No recuerdo haber autorizado la fabricación de ningún sello de los GAL, aunque se pudo hacer sin mi autorización porque el centro era muy complejo". Señaló que el Cesid era "un apéndice de Interior" en temas de terrorismo y que Perote estaba al mando de una agrupación dedicada a "adquisición de información por procedimientos especiales", por lo que "no es normal" que elaborase un estudio sobre terrorismo, materia en la que no era competente.