La lejanía electoral disminuyó la afluencia de políticos

VIENE DE LA PÁGINA 1 Respecto al tráfico, los mayores colapsos se vivieron sobre las nueve de la noche del viernes, cuando centenares de automovilistas avanzaban hacia Can Zam con idéntico objetivo: encontrar aparcamiento. La Guardia Urbana tuvo que emplearse a fondo en algunas ocasiones para impedir que las disputas entre los que pretendían estacionar el vehículo acabaran en pelea. La menor afluencia de público permitió en general -salvo en las horas punta- compensar la estrechez tanto en las calles del real como en las casetas que en buena parte han sido menores que las habituales. La mayor incomodidad fue para los visitantes que quisieron acceder en coche pese a las recomendaciones de los organizadores para que utilizaran el transporte público. El aparcamiento situado en el interior de la feria se llenaba pronto y los conductores se desesperaban dando vueltas hasta lograr su propósito. Los otros lugares habilitados al efecto, como el del nudo de la Trinidad, también se llenaban. El volumen de negocio de las entidades ha sido en líneas generales menor que en otras primaveras pese a que esta vez la lluvia no ha sido muy persistente. De todas formas, en muchas casetas confiaban en recuperar este fin de semana parte de los ingresos previstos. La Feria de Abril es para la mayoría de entidades la principal fuente de ingresos de que disponen para financiar las actividades que realizan el resto del año. Entre las casetas que se han ganado un público, aunque no representan a ninguna de las provincias andaluzas, se encuentra la de Castilla-La Mancha con sus platos tradicionales, tan distintos a los del sur pero que logran mucha aceptación entre los asiduos a la feria, tales como las migas manchegas y la pipirrana. Los políticos no se han prodigado este año tanto como en otras ocasiones. Tal vez la explicación tenga que ver con que no hay ningunas elecciones a la vista. La presencia del ex ministro José Borrell fue la que despertó mayor entusiasmo el pasado día 26, sobre todo entre la militancia socialista, que hizo pequeña la caseta del PSC. Ayer, ningún líder político visitó el real y no estaba previsto que ninguno de ellos se trasladara hoy con tal fin hasta Santa Coloma. La Feria de Abril va acabándose sin incidentes destacables. La Guardia Urbana ha destinado en total unos 70 agentes para encargarse de controlar el tráfico en los accesos, además de los efectivos del Cuerpo Nacional de Policía procedentes de Santiago de Compostela que han llevado el peso de la seguridad en el interior del recinto. En esta ocasión, los Mossos d"Esquadra no han intervenido.