El supertractor ganó a la retroaraña

Dos grandes máquinas han pugnado por encargarse de las labores más pesadas de la repoblación de Somosierra: la retroaraña y el tractor de alta estabilidad (TTAE). La retroaraña, una pala excavadora que clava sus pies en el suelo, era la máquina ideal para abrir el suelo de las vaguadas. A estas zonas, los tractores no pueden acceder, o si lo hacen, luego no pueden superar las pendientes de salida. Sin embargo, Medio Ambiente desechó pronto la retroaraña. Como una parte del terreno de Somosierra lo conforman pastos muy húmedos, sus enormes patas se hundirían en el suelo y lo dañarían.Entonces entró en escena el TTAE, inventado hace 15 años por ingenieros sevillanos. Supera pendientes muy empinadas sin volcar: sus cuatro ruedas cuentan con una ágil suspensión que permite que cada neumático se pegue al terreno de forma independiente.