Noventa grabados de Rembrandt visitan España

La exposición Rembrandt, el paisaje natural y humano, con 90 grabados, inició ayer, en la Fundación Carlos de Amberes, de Madrid (Claudio Coello, 99), un recorrido que hasta el 14 de junio de 1998 visitará Barcelona, Palma de Mallorca y Oviedo. La comisaria, Coca Garrido, pintora, grabadora y profesora de la Facultad de Bellas Artes de Madrid, ha seleccionado las obras entre las 300 que conserva la Casa Museo de Rembrandt en Amsterdam y que se prestan de una forma excepcional.El montaje de la exposición, organizada por la Casa Museo Rembrandt, la Fundación Carlos de Amberes y la Fundación la Caixa, agrupa los temas de Rembrandt (Leyden, 1606-Amsterdam, 1669) en autorretratos, paisajes, escenas bíblicas y religiosas, desnudos, retratos, alegorías y escenas costumbristas, que reflejan también la evolución de su técnica, donde predomina el aguafuerte, junto a la punta seca y el buril.

"Rembrandt sigue teniendo mucho que decir a las nuevas generaciones", declaró ayer Coca Garrido, cuyas investigaciones sobre las relaciones de los lenguajes de la pintura y el grabado encuentran en el artista holandés del siglo XVII un modelo inagotable. Las influencias en Goya y Picasso se completan con "una ética del artista profesional" que une el arte y el comercio frente a la actitud romántica de los pintores fatalistas.

La muestra se abre con 11 autorretratos, "estudios psicológicos donde el artista, convertido en el primer modelo, expresa su propio sentimiento", que inician el itinerario por otros temas presentes en su pintura, desde el primer encargo de La huida a Egipto al retrato póstumo de Jan Antonides van der Linden.

Coca Garrido recomienda una lenta mirada por las estampas, "para descubrir un gran universo dentro de los grabados incluso de pequeño formato". Sobre las estampas se distribuyen los blancos y negros del llamado mago de la luz, en un juego de claroscuro y tenebrismo, según la intensidad de la línea y las manchas tratadas como tema pictórico.

El montaje de los diversos temas también refleja las etapas que se han fijado en su carrera, con un primer periodo de Leyden, bajo la influencia de Caravaggio y su dominio del claroscuro, la primera década de Amsterdam, la más barroca, con abundantes retratos y escenas religiosas, y el segundo periodo de Amsterdam, más reposado e introvertido.

En todos ellos aparecen aspectos de su vida sentimental, con su esposa Saskia y su hijo Titus como modelos, y de sus fracasos económicos. En opinión de Coca Garrido, la maestría de Rembrandt radica en la manera abierta de ver y de interpretar las formas, a través de una estética barroca "de contraluces y esfumados".