Joselito: "Es un orgullo figurar en este cartel"

José Miguel Arroyo, Joselito, actuará hoy en la que será su tercera corrida de Beneficencia en Las Ventas. "Figurar en este cartel es un orgullo", sentencia el matador, que ya se vio anunciado en 1988 con Rafael de Paula y Fernando Cepeda, y en 1994, como único espada. "Aquella tarde fue imborrable", dice Joselito, que hoy torea con Rivera Ordóñez, mano a mano. El festejo empieza a las 19.00 y asistirá el Rey.Joselito, de 28 años, se declara rival de sí mismo. "Con Rivera hay cierto pique, pero mi única meta es la de superarme cada día", señala el torero, que se encuentra recuperado de la cogida que sufrió el 21 de mayo en Las Ventas. "Me encuentro bien, aunque la mano, en ocasiones, se resiente. Tal vez", declara, "por el esfuerzo que hago y la entrega que pongo cada vez que mato un toro".

Joselito considera que "la corrida de Beneficencia tiene tanta repercusión que torearla es un sueño para cualquier torero. Lo único que deseo es que, independientemente de que se corten o no orejas, pueda torear un toro como yo siento el toreo", manifiesta.

Tras largo peregrinar por las dehesas, Martín Arranz y Camará, apoderados de los dos espadas, eligieron dos toros de Juan Pedro Domecq, dos de Victoriano del Río y dos de Las Ramblas; aunque estos últimos, rechazados en el reconocimiento, han sido sustituidos por dos de Joaquín Núñez. "Creemos que es lo idóneo", cuenta Joselito, "porque la cabaña no se encuentra en un momento óptimo y con toros de varios hierros hay más posibilidad de que alguno se deje".

Joselito y Rivera donarán sus ingresos a la Fundación Joselito, que nació para fomentar la fiesta y ayudar a los profesionales, aunque aún no se ha puesto en marcha. "Lo único que se ha hecho ha sido el festival para José María Plaza", reconoce el matador. "De todos modos, yo no llevo ese tema. Ni sé lo que me correspondería ganar hoy, aunque espero que los beneficios sean elevados y se empleen en una buena causa", dice Joselito, que agradece el gesto a su compañero en el esperado mano a mano.