A la espera del derribo

Treinta casetas, de las 75 que aún quedan en el poblado chabolista magrebí de Peña Grande (distrito de Fuencarral), serán derribadas en los próximos días por orden judicial. Sus habitantes pueden optar a pisos de alquiler con subvención institucional dentro del programa por el que ya se ha realojado a 70 familias de ese núcleo. Pero no todos los afectados desean el traslado, informa Begoña Aguirre. Once familias se oponen a mudarse a una casa de alquiler por diversos motivos; el principal, que tal vez no puedan pagarla. En el primer año, los chabolistas abonarían una renta media de 33.000 pesetas mensuales para pisos que cuestan unas 60.000. Pasados 12 meses, el alquiler sube, salvo cuando las condiciones de los alojados hayan empeorado. Seis meses después vuelve a ascender. El objetivo es que pasados dos años los inquilinos paguen la renta íntegra. En 1993 había en el poblado 207 favelas.