Las víctimas, contra la reinserción

Robert Manrique, una de las víctimas del atentado de ETA contra los almacenes Hipercor de Barcelona, atribuido a un comando dirigido por Rafael Caride, calificó ayer de "muy positiva" la detención de este etarra y expresó su oposición a que en el futuro pueda beneficiarse de medidas de gracia. "Debe cumplir íntegramente la condena que se le imponga y no debe poder acogerse de ningún modo a la reinserción", declaró. "No entiendo cómo una persona que ha matado a tanta gente", añadió Manrique, "tiene la conciencia tranquila, si es que tiene conciencia, para estar tomando una copa en un bar".Manrique es delegado en Cataluña de la Asociación de Víctimas del Terrorismo. Resultó herido de gravedad en el atentado de Hipercor, en el que murieron 21 personas y 45 resultaron heridas. Sufrió quemaduras en la mitad izquierda de su cuerpo y se encuentra todavía bajo tratamiento.

Manrique expresó así su rechazo a la hipotétitica reinserción social de los autores del atentado de Hipercor. "No es comprensible que un terrorista sea condenado a una pena de incluso centenares de años y a los siete u ocho ya esté en la calle", dijo.

El abogado de la Asociación de Víctimas del Terrorismo, Josep Maria Fuster Fabra, anunció que esta entidad se personará como parte afectada "en todas las acciones judiciales". Fuster explicó que las víctimas del atentado de Hipercor no han percibido todavía ninguna de las indemnizaciones por responsabilidad civil, sino pequeñas cantidades por otros conceptos.

De las 44 familias que resultaron afectadas por el atentado, sólo 13 continúan luchando judicialmente. Respecto a los que han desistido, Manrique dijo que no comparte su posición, aunque puede comprender las razones que les impulsaron. "Desde el miedo, hasta el deseo de olvidar todo aquello".