Havel propone en Varsovia la celebración de una conferencia húngaro-polaco-checoslovaca

PIOTR ADAMSKI El presidente checolosvaco, Vaclav Havel, de visita oficial en Polonia, propuso ayer ante el Parlamento de Varsovia la celebración de una conferencia húngaro-polaco-checoslovaca con el fin de coordinar los esfuerzos de estos países por integrarse en Europa. "Por primera vez tenemos la oportunidad real de llenar el gran vacío político surgido en la Europa central tras la desintegración del imperio de los Austrias", manifestó en Varsovia el presidente checolosvaco. En el discurso de media hora ante los parlamentarios palacos, Havel expresó su intención de invitar "próximamente a representantes de Hungría y Polonia, así como a observadores de otros países europeos, al castillo de la capital eslovaca, Bratislava, "para poder discutir tranquilamente" sobre la coordinación de la política de dichos países con vistas a su integración europea. "Si intentamos volver a Europa por separado, el proceso durará mucho más y será más complejo", subrayó Havel. La iniciativa de Havel es la respuesta checolosvaca a las alusiones de algunos políticos polacos a la eventual confederación de los dos países, idea que nunca agradó a las autoridades de Praga por ser Polonia un país económicamente mucho peor desarrollado y con una población más de dos veces superior a la de Checoslovaquia.

Poco conciliador con Havel resultó ser el líder de Solidaridad, Lech Walesa, quien había renunciado a viajar a la capital polaca para un almuerzo ofrecido por el presidente checoslovaco. Según fuentes de Solidaridad, Walesa quiso demostrar de esta manera su malestar por el hecho de que Havel realizara su primer viaje presidencial a las dos Alemanias y no a Polonia.