El dólar sigue cayendo mientras que Japón afirma que el yen se encuentra en la pactada banda de fluctuación

El dólar continuó cayendo ayer, tras la reunión del grupo de los cinco y grupo de los siete en Washington, en el marco de la asamblea anual del Fondo Monetario Internacional (FMI) y Banco Mundial, al tiempo que el ministro japonés de Finanzas, Kiichi Miyazawa, anunciaba que el yen permanece aún dentro de la banda de fluctuación permitida en los acuerdos de París. Igualmente declaró que, al no haberse dado un cambio fundamental en las economías de los países miembros, no ha sido necesario remodelarlos acuerdos y aprovechó la ocasión para reafirmar que la única moneda que ha registrado movimientos en estos últimos meses ha sido el yen, ya que el resto de las divisas europeas han permanecido estables. El ministro japonés mostró su confianza en que Japón adoptará un nuevo paquete de medidas fiscales encaminadas a mejorar la demanda interna y, así, frenar el alza del yen frente al dólar.Mientras, el la divisa norteamericana cerró en el mercado de divisas de Francfort registrando claras bajas respecto a la jornada anterior, debido a la falta de acuerdos concretos tras la reunión de las nacionales más industrializadas. También en Tokio, el dólar se situó momentáneamente por debajo de los 145 yenes, ante la falta de sustancia del comunicado del grupo de los siete. El Banco de Japón se vio obligado a intervenir en apoyo del dólar, que logró recuperarse hasta un máximo de 146,10 yenes. Según los operadores, informa Shearson Lehman/American Express, esta falta de medidas concretas producirá nuevas alzas del yen contra el dólar, ya que las intervenciones de los bancos centra les no serán suficientes para detenerlas.

Por otra parte, las declaraciones de distintos representantes del banco central alemán ha renovado las esperanzas entre los especuladores en tomo a un recorte de la tasa de descuento, que ahora se sitúa en el 3%. Claus Koehler, miembro del consejo del Bundesbank, anunció que el crecimiento monetario debido a la afluencia de capitales extranjeros requiere recortes de esta tasa. Si así ocurriera, ésta se situaría en el punto más bajo de la historia.