Diez nuevos muertos en los disturbios étnicos de Karachi

Diez personas resultaron muertas ayer en Karachi y cerca de otras 50 heridas como consecuencia de los enfrentamientos étnicos entre pashtunes y mohajires que desde el pasado domingo vienen produciéndose en dicha ciudad paquistaní. Dos de los muertos habían resultado heridos en los disturbios de anteayer y de los otros ocho, dos fallecieron por disparos de bala del Ejército y uno linchado por una multitud enfurecida.La figura que encabeza la oposición paquistaní, Benazir Bhutto, hija del asesinado primer ministro Mohamed Alí Bhutto, condenó ayer los enfrentamientos y manifestó que el Gobierno, que estableció el toque de queda en la mayoría de los barrios de Karachi, debía dimitir. En su opinión, las autoridades de Islamabad deberían convocar elecciones generales.

El origen del problema al que Paquistán se enfrenta hoy (...) radica en la deliberada política del general Mohamed Zia Ul Haq [presidente del país] para socavar las instituciones nacionales y suprimir los partidos políticos", declaró Bhutto en una conferencia de prensa.

La líder de la oposición pidió la dimisión inmediata del gobernador y del primer ministro de la provincia de Sind, donde se encuentra situada la ciudad de Karachi, anteriormente capital del país. Bhutto también dijo que Zia debía ser desposeído de su cargo como jefe supremo del Ejército.

Con las nuevas víctimas se elevan a 174 los muertos desde el inicio de los enfrentamientos. La ola de violencia se desató el pasado domingo cuando cerca de 2.000 pashtunes pertrechados con armas automáticas atacaron a mohajires en Orangi Town y mataron a un centenar de personas. Los disturbios enfrentan a pashtunes, originarios del noroeste del país y de Afganistán, y mohajires, que comenzaron a llegar de la India británica, cuando se produjo la partición en 1947.

Por otra parte, el ministro afgano de Asuntos Exteriores, Sahabzada Yaqub Jan, viajará a China el próximo día 25, según informó ayer un portavoz. Aunque no se facilitó una agenda de las conversaciones que mantendrá durante su visita, Yaqub tratará muy probablemente del conflicto afgano.