El Patrimonio Nacional solicita que se incoe expediente de ruina a la Casa de Infantes

El Patrimonio Nacional ha solicitado a la Gerencia Municipal de Urbanismo la incoación de un expediente de ruina de la llamada Casa de Infantes de El Pardo, construcción incluida en el conjunto histórico de la población que fue construida hace más de dos siglos. Según un portavoz de Patrimonio, ello no significa que se quiera derríbar la casa, "pero de esa forma se salva la responsabilidad legal" mientras se termina el proyecto de restauración, que supone 150 millones de pesetas.Entre tanto, la Gerencia Municipal de Urbanismo ha informado a la junta de distrito que el estado de la casa no es tan grave como para declarar la ruina inminente, mientras los 48 vecinos alojados en el inmueble han colocado pancartas de protesta en las ventanas por la falta de soluciones.

El pasado 25 de enero el jefe del servicio de arquitectura de Patrimonio envió una carta en la que se solicitaba la incoación de un expediente de ruina de la Casa de Infantes, situada al comienzo de la carretera del Cristo de El Pardo, cerca del palacio. La casa, que se encuentra en la actualidad apuntalada, está habitada por 48 vecinos que hace meses iniciaron una negociación con el Patrimonio, al ser este organismo el propietario del edificio, con objeto de ver en qué condiciones se les trasladaba a otras viviendas.

Según el Patrimonio Nacional, el inmueble, a pesar de su importancia, ha sido valorado en poco más de 30 millones de pesetas, en tanto el presupuesto de las obras ascendería a 76 millones, cifra que sería duplicaría en caso de hacer una restauración total del edificio.

"Para esta restauración es necesario que los inquilinos, algunos con muchos años de estancia, abandonen la casa. No sabemos cuál va a ser la solución adoptada pero no se va a dejar a nadie en la calle", dijo el citado portavoz.

Mientras el Patrimonio adopta una solución, la Gerencia de Urbanismo ya ha elaborado un informe en el que se indica que una vez visitada la edificación "se ha comprobado que su estado. no es tan grave como para que pueda considerarse de ruina inminente", al tiempo que se requiere al propietario de la finca para que realice las obras de seguridad necesarias mientras se decide sobre la incoación o no del expediente de ruina.