Frivolidad y 'ley de rebajas'

Hace unos días (27 de febrero de 1983) se ha hecho eco en su periódico de unas declaraciones del consejero de Comercio de la Generalidad de Cataluña, Francesc Sanuy. Decía el político catalán que las críticas que estaba recíbiendo la llamada ley de rebajas, aprobada recientemente por el Parlamento, no eran representativas y que estaban formuladas por ANGED, grupo de comerciantes poco significativo.La Asociación Nacional de Medianas y Grandes Empresas de Distribución (ANGED), cuya secretaría general ostento, tiene un enorme peso en la vida comercial del país. Nuestros comercios mueven al año más de 350.000 millones de pesetas en mercancías divérsas, tienen más de 50.000 empleados y venden cercáde, 500.000 productos distintos. Otra asociación, ANMED, que agrupa a los medianos comerciantes, factura más de 50.000 millones. de pesetas anuales y emplea a más de.10.000 personas.

Como representante del sector, observo con preocupación la frivólidad o el desconocimiento con que se expresan algunos representantes públicos al hablar de nuestro trabajo. Declaraciones como las del señor Sanuy sirven para entender actuaciones políticas como la ley de rebajas denunciada ya por la CEOE como inconstitucional y criticada por consumidores, fabricantes y comerciantes.

Le ruego publique esta carta como réplica a las declaraciones del señor conseller, que entiende la actividad comercial. de modo tan pintoresco y que lleva su afán rebajador a limitar la importancia de un sector tan considerable como el nuestro. Cuando intenta rebajarnos no hace otra cosa que rebajar su credibilidad. / Secretario general de ANGED.