España gastará 64.000 millones de pesetas en comprar aviones de combate franceses

El Gobierno español ha decidido comprar 48 aviones de combate Mirage F-1, de fabricación francesa, valorados en ochocientos millones de dólares (unos 64.000 millones de pesetas), lo que provocará un aplazamiento indefinido de los planes de adquisición de los reactores F-16 norteamericanos, según informó ayer el diario The Washington Post.

El corresponsal del Post en Madrid, Miguel Acoca, cita fuentes diplomáticas e industriales como origen de su información y señala que, aunque hasta ahora no hay confirmación oficial del Gobierno de Madrid, se espera un anuncio próximamente. Acoca añade que la compañía aeronáutica norteamericana General Dynamics, fabricante del F-16, habría presionado durante las pasadas semanas cerca del Gobierno y del Ejército del Aire españoles para que éstos compraran 72 aviones del tipo citado, por valor de 1.500 millones de dólares.

La decisión del Gobierno de Madrid en favor de los aparatos franceses estuvo «aparentemente influida» por consideraciones políticas y económicas, señala el Post, que añade que la compra de estos aviones influiría en la actitud de Francia respecto del ingreso de España en el Mercado Común. Además, el acuerdo con Francia incluye la fabricación de partes de los aviones en España, lo que supondría un aumento de puestos de trabajo en la industria aeronáutica.

El diario norteamericano recuerda que el Tratado de Amistad y Cooperación entre España y Estados Unidos contiene un acuerdo de suministro de armamento, en el que se pide a Washington que ayude a España a obtener 72 F-16, el avión elegido por los países de la OTAN. Según Acoca, no está claro por qué se incluyó la referencia al F-16 en el Tratado, y cita a funcionarios españoles diciendo que fue a causa de la insistencia del ex secretario de Estado Henry Kissinger, lo que fue negado por funcionarios norteamericanos.

La compra de los Mirage franceses supondrá que el Ejército del Aire español invertirá en estos aparatos todos los fondos disponibles para la adquisición de aviones de guerra en los próximos ,dos años. Señala Acoca que recuerda también que en 1975 el Ejército del Aire español prefirió los Mirage a los F-4 Phantom norteamericanos.