Proyectos para la próxima temporada teatral

La próxima temporada teatral, con su clásico comienzo a finales de septiembre, comienza a tener nombres concretos, aunque los empresarios someten a larga meditación los ingresos de taquilla para intentar salvar el retraimiento de espectadores en la pasada temporada. La cartelera actual, basada en una frivolidad decadente, se intentará prolongar hasta el aburrimiento de un público obligado a ejercer de turista y transeúnte.El teatro nacional María Guerrero, donde se han realizado algunas obras de reforma, abre la temporada con el estreno de Solos en la Tierra, de Manuel Alonso Alcalde, premio Lope de Vega 1972, que sube al escenario con cinco años de retraso, ya que las bases de este concurso patrocinado por el Ayuntamiento de Madrid estipulan el estreno el mismo año de su concesión. La obra estará dirigida por Esteban Polls. El otro montaje programado es El arquitecto y el emperador de Asiria, de Fernando Arrabal, por el mismo equipo que estrenó la polémica pieza en Barcelona. En el teatro de la Zarzuela se repondrá Los vagabundos, basada en la novela de Máximo Gorki.

En el resto de los teatros se perfilan la confección de compañías. Los proyectos más avanzados son los del director José Tamayo, con La detonación, de Antonio Buero Vallejo, y La Celestina, de Fernando de Rojas, en una versión de Camilo José Cela. Otras obras que figurarán en la temporada son dos esperpentos de Valle Inclán: La hija del capitán y Las galas del difunto; Santa Juana de los Mataderos, de Brecht, en versión de Alberti, y Malditas sean Coronada y sus hijas, de Francisco Nieva.