

Koke y Barrios enderezan al Atlético en su necesitada victoria ante el Seattle Sounders
El de Moratalaz ejerce de centrocampista llegador con dos goles, pero la victoria del PSG obliga a los rojiblancos a ganar por tres tantos al Botafogo de diferencia para asegurar la clasificación a octavos


Sobrepresionado por tener que restañar la imagen ofrecida ante el PSG y también por la necesidad de registrar una cifra de goles que contrarrestara los cuatro que encajó Oblak en el gris estreno, el Atlético ventiló al Seattle Sounders con el partido que se le exigía ejecutar ante un rival inferior. Ganó con soltura el conjunto de Simeone, liderado por la estirpe de centrocampista llegador que Barrios esconde, aunque también padeciera sus momentos de apuro. Le faltó al Atlético más tino para equilibrar su coeficiente de goles, que será decisivo después de que el Botafogo derrotara al PSG (1-0).La inesperada y sonada victoria del conjunto carioca, la campanada del torneo, por encima del empate del Madrid ante el Al-Hilal, obligan al Atlético a ganar por tres goles de diferencia si el campeón de Europa, como sería lo lógico, derrota al Seattle Sounders en la última jornada.
Si el equipo de Luis Enrique no tiene un pinchazo histórico ante los estadounidenses y el Atlético se impone al Botafogo los tres equipos empatarían a seis puntos. El primer criterio de desempate del reglamento del torneo cuenta los puntos que han sumado los tres conjuntos en los enfrentamientos entre ellos y sumarían tres cada uno. El siguiente criterio es la diferencia de goles en los enfrentamientos entre los tres. El PSG ahora mismo tiene (+3), el Botafogo (+2) y el Atlético (-4) porque no le contabiliza el encuentro ante los Sounders. Con una victoria por diferencia de tres goles sobre los brasileños, los de Simeone se quedarían en (-1) y estos también. Para romper ese empate pasaría aplicarse el de los goles a favor entre ellos y ahí el Atlético, si logra esa renta de tres goles, siempre sumaría más que el Botafogo que ahora está en (+2). El Atlético ahora tiene (0), porque no marcó ningún gol al PSG. Es decir cualquier diferencia de tres goles clasificaría a los rojiblancos.
Había cierto temor a que el entusiasmo del Sounders y de su hinchada pudiera derivar en un resbalón que hubiera sido catastrófico para el club, Simeone y sus jugadores. La segunda parte ante el Botafogo (2-1) en la que los estadounidenses pudieron empatar había sobrevolado en el cuartel general rojiblanco en la previa. No consintió el Atlético que el Sounders le dejara fuera del torneo antes de lo esperado, aunque amagara con ofrecer tramos de suspense al duelo por las claras ocasiones que marraron Julián y Sorloth para abrir distancias y cerrar el partido.
Comenzaron mandones los rojiblancos, con Koke a la manija, Barrios a la izquierda y Sorloth como cabeza de área. Griezmann tocó banquillo. La presencia de Koke le dio cuajo a un equipo que lo necesitaba después de las altas dosis de malos pases que dio ante el campeón de Europa. Koke imprimió dinamismo y criterio vertical para instalar a su equipo en campo contrario. No tardó el Atlético en ligar una jugada de buen toque. De Paul condujo en paralelo a la frontal del área, mezcló con Sortloth y este con Julián, que pasó de rosca el giro de tobillo ante la salida de Frei. Un fallo inusual en un jugador de golpeo exquisito tanto cuando imprime potencia como cuando suaviza la definición.
Fue la otra novedad, la de Barrios en la izquierda, la que pesó para abrir el marcador después de que Giulinao rompiera al espacio pleno de velocidad. Tuvo pausa para recortar y esperar la llegada de Barrios. El volante de Moratalaz conectó un derechazo potente que escupió el larguero hacia adentro. Un gol de centrocampista llegador, que es para lo que le alineó Simeone en esa posición. Al chico le cuesta mentalizarse de que ese costado puede ser un buen lugar para ser determinante porque a pierna cambiada puede hacer daño con su buen disparo. Poco antes del gol, había tenido una ocasión para irse hacia dentro y chutar y no lo hizo. Tiene que afilar el colmillo en esas situaciones si quiere asentarse en ese puesto.
El gol dio paso a cierta rebeldía del Sounders, que mostró ser un equipo lo suficientemente decente a nada que el Atlético le concediera alguna migaja. Tiene jugadores de buenas maneras como De la Vega Y se las concedió con una defensa dubitativa en las jugadas a balón parado. A Roldán le cayó la pelota en un barullo en el área y su disparo centrado impactó contra el cuerpo de Oblak.
Necesitaba el Atlético marcar territorio y distancia en el marcador y le costó. Sorloth empotró en el pecho de Frei un mano a mano con el meta suizo vencido y también se le fue alto una volea franca. Un penalti señalado por presunto derribo a Giiuliano lo rectificó el colegiado argentino Yael Falcón tras visionarlo por aviso del VAR y aplicar el criterio del Viejo Testamento. Estimó que fue un forcejeo.
Tuvo que irse al descanso el Atlético con un marcador corto. Así que tuvo que protagonizar el mismo arranque dominador del primer acto. Se quedó en la caseta Giménez, al parecer por molestias. Le reemplazó Witsel, que llevaba tiempo sin jugar un partido trascendente. Durante el curso sorprendió que Simeone no tirara más del belga en algunos de los partidos en los que el equipo se jugó los títulos porque la temporada pasada dejó señales de que para determinados partidos y momentos podía ser un jugador útil. En San Siro, por ejemplo, en la ida de los octavos de final de la Champions fue el que sostuvo al equipo. El gol que marcó, tras recibir una dejada de cabeza de Le Normand, por lo menos le servirá para agrandar la salida del club de un veterano ejemplar.
El 2-0 parecía que ya daría paso a la tranquilidad rojiblanca, pero la falta de contundencia para resolver una pelota disputada en el área la aprovechó Rusnak. Una vez más regreso a la incertidumbre, aunque Barrios la frenó con cazando con el interior de su bota derecha el despeje hacia atrás de un defensor local. El toque fue fino por la potencia media del golpeo y su colocación.
Con 3-1, Simeone ya comenzó a mover el banquillo para dar entrada a Gallagher, Griezmann y Correa. El caudal de ocasiones del Atlético bajó, que además se encontró inmerso en una especie de tiroteo del que pudo salir malparado. El Sounders terminó registrando 15 remates por 16 del Atlético. De haber embocado alguno de ellos los rojiblancos se exponían a un final angustioso que no se dio.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
¿Tienes una suscripción de empresa? Accede aquí para contratar más cuentas.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.
Sobre la firma
