Iker Muniain se plantea la retirada tras despedirse de San Lorenzo

Iker Muniain (Pamplona, 32 años) volvió a Argentina para despedirse y anunciar que no cumplirá lo que le resta de contrato con San Lorenzo de Almagro. El ex capitán del Athletic lo anunció en una conferencia de prensa de manera oficial. No son razones deportivas, porque el navarro tiene ofertas para irse a jugar a algún destino exótico, pero baraja la posibilidad de retirarse del fútbol por cuestiones familiares. En su estancia en el club de Boedo ha echado mucho de menos a sus hijos, Iker de diez años y Claudia de siete, y pretende no alejarse tanto de ellos. “San Lorenzo es adictivo; una vez que te metés, no lo podés soltar más”, aseguró, pero, “vine condicionado por una situación familiar, de tener lejos a mis hijos. Cualquiera que sea padre sabe que es una de las cosas más difíciles”.

Su entrenador, Damián Ayude, lo comentaba al diario deportivo Olé: “Él estaba con ese tema de que extrañaba mucho a los hijos, que son chicos, y está en ese encuentro, recuperando el tiempo que no venía teniendo con ellos”. Era antes de que Iker tomara la decisión de no volver. “Acá lo esperamos, quiere mucho al club, lo ha dicho, pero principalmente lo ha demostrado defendiéndolo dentro y fuera de la cancha”, reconocía Ayude, que, sin embargo, no profundizó con el jugador sobre su futuro. “No me pareció el momento para preguntarle que va a hacer. Él es un gran profesional y sé que se va a manejar de la forma correcta, así que acá lo esperamos o si no, esperamos su llamado o mensaje”.

Dice Iker que lo pensó mucho para dar el paso. “Es una decisión, como todas, muy meditada, difícil, pero en el deporte como en la vida hay que tomar decisiones por un motivo o por otro”, y aseveró que, “me voy, pero un trocito de mí se queda aquí para siempre”, porque, “viví nueve o diez meses maravillosos, más allá de todas las circunstancias o problemas que ha habido en algún momento”. Según el capitán de San Lorenzo, “ha sido muy especial, muy bonito, un recuerdo que me llevo para toda la vida. Un viaje que puede parecer corto, pero, y lo digo de corazón, ha merecido mucho la pena”.

El futbolista que levantó la última Copa ganada por el Athletic, se cuestiona ahora, con 32 años, la retirada. “Por primera vez en mi carrera desde que debuté con 16 años me planteo dejar de jugar”, y aseguró que, “hay muchas posibilidades de que esto suceda, tendré que seguir meditando estos días porque la decisión de no seguir aquí me ha absorbido mucho, no ha sido nada fácil tomar esta decisión”.

Muniain, que cedió su número 10 del Athletic a Nico Williams, del que se está hablando mucho en las últimas semanas, llegó a Buenos Aires en septiembre de 2024. Ha jugado 26 partidos, 18 de ellos como titular y marcó cuatro goles. No sumó más minutos porque un desgarro en el recto anterior del cuádriceps derecho le tuvo de baja durante varias semanas.

El navarro se identificó enseguida con la idiosincrasia del club bonaerense y con la hinchada del nuevo Gasómetro. “Me llevo sobre todo el cariño y el repeto de cada hincha que me crucé”. También, “me llevo ver la cancha estallar cada vez que salté al campo, el aguante de la gente en los momentos malos y buenos. El corazón de mis compañeros, el orgullo, el coraje, el enfrentarse a situaciones muy complicadas. Viví momentos realmente conmovedores que me guardaré”.

Muniain se convirtió en el altavoz de sus compañeros cuando el club dejó de pagarles su salario durante varios meses a consecuencia de la crisis institucional que obligó a cambios profundos en su cúpula dirigente. “Los jugadores del plantel profesional queremos manifestar públicamente nuestra profunda preocupación y malestar ante la delicada situación que estamos atravesando” escribió Muniain en sus redes sociales. “Esperamos que esta situación se resuelva con la urgencia y seriedad que requiere. No buscamos el conflicto, sino una solución concreta y justa”.

En El Gráfico, la publicación deportiva más veterana de Argentina, escriben con motivo de su despedida que, “en medio de los profundos problemas políticos y económicos del Ciclón, el vasco fue bandera de un equipo que llegó más lejos de lo pensado: la semifinal del Torneo Apertura en la que cayó con Platense”. Rinden tributo a la figura del futbolista navarro que debutó como profesional con 16 años y tras otros tantos en la brecha, ha decidido interrumpir su trayectoria en Argentina y posiblemente en el fútbol.