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El quebrantahuesos mira cada vez más al sur

El centro de cría de Cazorla, referente internacional, vuelve a batir récord de nacimientos aunque la especie continua aún en peligro de extinción. Ahora llegará a Grazalema, el punto más meridional de Europa

Un ejemplar de quebrantahuesos del centro de cría Guadalentín de Cazorla. / CONSEJERÍA ANDALUZA DE SOSTENIBILIDAD Y MEDIO AMBIENTE
Ginés Donaire

Las poblaciones de quebrantahuesos (Gypaetus barbatus) siguen creciendo en toda España gracias en buena medida a la recuperación de esta especie en Andalucía, donde el último año volvió a batirse el récord de nacimientos, con 11 nuevos ejemplares, una cifra que representa entre el 25 y el 40% de todos los nacidos en la red de cría internacional. Y la especie mira cada vez más al sur, pues la Junta de Andalucía ha anunciado su reintroducción en el gaditano parque natural de Grazalema, que se convertirá en el hábitat más meridional de toda la Unión Europea para esta ave necrófaga de gran tamaño (puede sobrepasar los 2,80 metros de envergadura) que, no obstante, sigue incluida en el Libro Rojo de las Aves de España en la categoría de “En peligro de extinción”.

Los Pirineos sigue siendo el principal reducto del quebrantahuesos en la península Ibérica, pero es Andalucía, donde la especie se extinguió en 1987 (antes lo había hecho en los Picos de Europa), la comunidad con una mayor expansión en los últimos años. Aquí se identifican ya una docena de territorios de cría y también aquí se encuentra el centro de cría de donde cada año salen pollos de quebrantahuesos hacia otros lugares de España y de otros países.

En el centro de cría Guadalentín, en el parque natural de Cazorla, Segura y Las Villas (Jaén), han nacido en la última década un total de 90 ejemplares de quebrantahuesos, de los que la mayor parte se han soltado en los diferentes puntos de liberación de la especie en Europa y otros permanecen para mantener el ‘stock’ reproductivo en cautividad. De hecho, está previsto que los últimos nacimientos sean transferidos a la Fundación para la Conservación del Quebrantahuesos (FCQ), otros dos serán liberados en Vercors (Francia) y tres, en Cazorla.

En toda Europa se estima que existen unas 200 parejas reproductoras, de las cuales unas 100 habitan en territorio español. “El centro Guadalentín se ha convertido ya en un referente internacional para la recuperación del quebrantahuesos, hemos sido capaces de revertir la situación en la que nos encontrábamos a finales del siglo pasado”, apunta Francisco Rodríguez, director de este centro andaluz ubicado a 1.300 metros de altitud y que está gestionado por Vulture Conservation Foundation (VCF).

Además, Rodríguez resalta que las instalaciones de este centro están capacitadas para realizar adopciones dobles y triples de pollos, es decir, que, además de los nacidos aquí, también se crían pollos procedentes de otros centros de cría europeos cuyas parejas no pueden criarlos por cualquier motivo.

Siete pollos han llegado a este centro cedidos por el Gobierno de Aragón gracias al convenio de colaboración firmado hace dos años entre las dos administraciones regionales con el objetivo de aumentar la diversidad genética de las poblaciones liberadas en Andalucía y Picos de Europa.

Las sierras de Cazorla, Segura y las Villas, en Jaén, y Castril, en Granada, son los principales territorios del quebrantahuesos en el sur de España, pero tampoco hay que olvidar zonas como Sierra Nevada o los montes limítrofes de Albacete y Murcia. Sin embargo, la Junta de Andalucía acaba de anunciar la intención de reintroducir esta especie en el parque natural Sierra de Grazalema, en Cádiz, a donde llegarán ejemplares del centro de cría de Cazorla dentro del Plan de Recuperación y Conservación de las Aves Necrófagas de Andalucía con la colaboración de la Fundación para la Conservación de los Buitres (VCF), entidad de referencia a nivel europeo. Será la primera vez que un punto de suelta de esta especie se sitúe fuera de Andalucía oriental, convirtiéndose en el más meridional de toda la Unión Europea.

“El regreso del quebrantahuesos a la Sierra de Grazalema será un nuevo capítulo en la historia de éxito de la conservación en Andalucía y una forma de cerrar un círculo histórico, de devolver al paisaje un símbolo que nunca debió desaparecer”, ha destacado la consejera andaluza de Sostenibilidad y Medio Ambiente, Catalina García. A su juicio, esta ubicación “permite conectar poblaciones de quebrantahuesos europeas con las del norte de África, lo que refuerza la viabilidad futura de la especie”.

Liberación de ejemplares jóvenes

El programa de reintroducción del quebrantahuesos que lleva a cabo la Junta de Andalucía busca conseguir una población autónoma y estable en la región mediante la liberación de ejemplares jóvenes por el sistema de la cría campestre o también llamado ‘hacking’. Con esta técnica, originalmente utilizada en cetrería, se persigue lograr que el ave asimile el área de la suelta como su lugar de nacimiento y, por tanto, regrese a ella para asentarse y reproducirse. De este modo, aunque durante los primeros años pueden llegar a realizar grandes desplazamientos, cuando alcanzan la edad reproductora –que es tardía, entre los siete y diez años–, regresan a sus orígenes y se fijan al territorio, “donde con un poco de suerte formaran pareja y tendrán descendencia”, apunta el director del centro Guadalentín. Los pollos se liberan con aproximadamente 90 días de edad, y la comida se les deposita en las cuevas a través de unos tubos de modo que no tienen contacto con el ser humano.

El quebrantahuesos desapareció de los montes andaluces debido principalmente a la caza y al expolio de huevos. Para la Sociedad Española de Ornitología (SEO/BirdLife), la principal amenaza que afecta a la especie es el repunte del uso del veneno, una actividad ilegal que ha llegado a suponer más del 30% de las bajas sufridas por la rapaz. Sin embargo, la Estrategia andaluza para la erradicación del uso ilegal de cebos envenenados ha aliviado esta situación en los últimos años, aunque todavía se siguen presentando amenazas como los accidentes con tendidos eléctricos, la contaminación con sustancias químicas, la desaparición de las prácticas ganaderas tradicionales y la competencia por los lugares de nidificación con el buitre leonado.

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Sobre la firma

Ginés Donaire
Corresponsal de El PAIS en Jaén desde septiembre de 1999. También soy colaborador de la Agencia Efe y, desde 2021, responsable del medio digital 'Alma de Pueblos' sobre el Reto Demográfico y el medio rural. Especializado en la información agraria. Asociado del Colegio de Periodistas de Andalucía. Graduado en Derecho por la UNED.
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