Los psiquiatras descartan que la parricida de Pilas sea una enferma mental

La mujer acusada de haber matado y congelado a sus dos recién nacidos en Pilas (Sevilla) no sufre “ninguna enfermedad mental”. Así lo han ratificado en el juicio los dos psiquiatras del Instituto de Medicina Legal de Sevilla que trataron a Sara L. H. tras ser detenida en 2012. Los expertos han asegurado ante el jurado popular que la acusada no está enferma “con una probabilidad del cien por cien” y que lo hizo “sabiendo lo que estaba aconteciendo y tomando libremente la decisión de llevarlo a cabo”. La madre mantiene que uno de los bebés nació muerto, tras dar a luz sola en la bañera de su casa, y que no recuerda nada del segundo embarazo. La fiscalía y la acusación particular piden para la madre una pena de 40 años de cárcel.

Durante sus declaraciones, los dos psiquiatras han apuntado que Sara sí padece un trastorno de la personalidad de tipo dependiente por miedo al rechazo social, informa Efe. “Son personas retraídas, con tendencia a parecer raras, que necesitan la referencia y el apoyo de los demás”, han descrito. Sobre que la acusada no recuerde uno de los partos, ambos han afirmado que “uno puede olvidar determinados momentos” del embarazo “pero no se olvida todo”.

Contra esta versión, la psicóloga propuesta por la defensa ha asegurado que la acusada padece un trastorno de la personalidad múltiple y sufre “lagunas amnésicas” como consecuencia de “afrontar situaciones de estrés calificadas como traumáticas”. “No ha llegado a elaborar el duelo, de manera que cuando los congela, congela también su duelo, y por eso no es capaz de recordar”, ha señalado. Asimismo, y en contra de las declaraciones de los forenses que practicaron la autopsia a los pequeños, un especialista en medicina forense propuesto por la defensa ha negado que los bebés fallecieran por sumersión. “Tengo la certeza, al cien por cien, de que no hubo ahogamiento”, ha matenido.

Por último, una forense del Instituto de Medicina Legal de Sevilla ha señalado que, según una conversación con la acusada, tiene la “sensación” de que la madre asesinó a un tercer hijo, cuyo proceso de descomposición le motivó para congelar, posteriormente, a los otros dos bebés. Tras ser detenida al haber encontrado el padre el primer bebé, la experta le preguntó a la acusada por qué lo congeló. “Me dijo que para no destruirlos, refiriéndose a ‘mis hijos’, en plural, cuando aún no sabía que su exmarido ya había encontrado el segundo niño”, ha argumentado.