Ascer y los sindicatos fracasan en su acercamiento

La patronal cerámica (Ascer) y los sindicatos del sector no consiguen llegar a un acuerdo sobre el convenio colectivo que afecta a 15.000 trabajadores. Tras tres horas de discusión ambas partes salieron del encuentro sin acercar posiciones aunque con una nueva cita para el próximo viernes a las cinco de la tarde. De momento, los sindicatos mantienen la huelga de otros tres días a partir del día 15. “El encuentro ha ido en la misma línea de los últimos, aunque es cierto que en este hemos debatido los puntos con mayor profundidad y hemos hecho hasta tres recesos para clarificar ideas”, explicó el secretario general de MCA-UGT, Vicente Chiva.

El representante sindical dijo salir “más contento” de la reunión que en las últimas ocasiones, sin embargo, reconoció que ninguna de las partes ha cedido en los puntos fundamentales que mantienen bloqueado el convenio colectivo del azulejo y que, por tanto, "no ha habido acercamiento". De la misma forma se expresó Vicente Ortells, secretario general de Fecoma-CC OO.

Entre los puntos básicos de este desencuentro, los sindicatos no admiten que el nuevo convenio pueda compensar subidas salariales con bajadas de complementos que implicaría una congelación de las remuneraciones. Tampoco la eliminación de la ultraactividad de los convenios, porque supondría que, en caso de no haber acuerdo, el sector pasaría a estar regulado por el Estatuto de los Trabajadores. Algo que ocurrirá a mediados de este año si no se consigue pactar el nuevo documento.

Documento común

La pérdida de un documento común es uno de los mayores temores de los sindicatos. El secretario general de Ascer, Pedro Riaza, ha manifestado en otras ocasiones que no quiere perderlo porque podría llevar a las empresas, implantadas en su mayoría en el triángulo azulejero de Castellón, a iniciar prácticas de competencia desleal al no tener un marco homogéneo de condiciones laborales.

Por otro lado, UGT y CC OO exigen el mantenimiento de la capacidad adquisitiva equiparando los salarios a la subida del IPC. Un extremo que ha sido rotundamente rechazado por la patronal en todas sus manifestaciones públicas.

A la espera de la reunión del viernes, los sindicatos continuarán con los trabajos preparatorios de los nuevos paros previstos para la próxima semana.