‘Los empeños de una casa’: hombres necios y mujeres de las dos orillas
La Compañía Nacional de México teje una fiesta barroca cómplice, contemporánea y muy divertida en torno a la opera prima de Sor Juana Inés de la Cruz, con 17 actores cantantes sembrados


Sor Juana Inés de la Cruz, gran proveedora literaria de la corte virreinal de la Nueva España de finales del XVII, fue la primera feminista de las Américas. En sus obras puso de relieve el entendimiento, el valor y la sabiduría de las mujeres. Poeta, ensayista, comediógrafa, Sor Juana proyecta su carácter en el del personaje de Leonor, libérrima coprotagonista de Los empeños de una casa, comedia de enredo que está en gira por España en un montaje soleado, hilarante e ingenioso, con un reparto sembrado de 17 actores cantantes de la Compañía Nacional de Teatro (CNT) de México.
Para tener al público en vilo, Aurora Cano, directora titular de la CNT, y Jesús Hernández, arquitecto escenógrafo, han creado un escenario registrable en forma de timbal o de luna llena, en el que se abren sucesivamente trampillas y escotillones de todas las formas y tamaños, por las que salen los personajes sorpresivamente, para ser tragados después, como en los espectáculos de magia. No veía nada similar desde que Robert Lepage estrenó internacionalmente Juego de cartas 1: Picas, en 2012, durante la época mejor del nuevo Circo Price, y desde que Philippe Genty representara Pasajeros clandestinos en Vitoria-Gasteiz, en 1996. Pero a diferencia de ambos espectáculos, al levantarse las escotillas en Los empeños… sus tapas configuran cada una de ellas un telón de fondo en el que aparecen, por ejemplo, la biblioteca de Sor Juana o el comedor de doña Ana, confeccionado con cerámica de Puebla, prima hermana de la de Talavera.
Este trabajo sobre el eje vertical de la escena, inusual en el teatro contemporáneo, transforma la comedia de enredo en un vodevil de trampillas por las que los personajes aparecen como muñecos de resorte. El hermano de Doña Ana, sus pretendientes y sus criados son fantoches de cuyos hilos la monja y la directora se complacen en tirar.
Aunque también alguna de las féminas se mueve como títere, en este tablero ellas tienen la iniciativa siempre: incluso Castaño, el gracioso, cuando se traviste agarra la sartén por el mango, pues Sor Juana trastoca los estándares psicológicos que el clero le atribuía a cada género. Cano, además, acentúa la metateatralidad del enredo original (“inspírame una traza que de Calderón parezca”, dice Sor Juana por boca de Castaño, en una escena de la que su intérprete saca oro negro) mediante la adición de varias secciones en las que la propia autora aparece gestando esta obra para María Luisa Manrique de Lara, virreina con la que mantuvo una relación afectiva.
Entre verso y verso, Cano calza una decena de boleros que entran como un guante en la mano de una princesa. En suma, el espectáculo es una feliz fiesta barroca donde a cada fin de acto el teatro se transforma en un gran karaoke, con el público cantando a coro Sin un amor, Piel canela y Lágrimas negras. El resultado es óptimo en todos los apartados. Se palpa que la CNT es una compañía estable, con 54 actores en plantilla, como las de la Europa central y del Este.
Los empeños de una casa
Texto: Sor Juana Inés de la Cruz. Versión y dirección: Aurora Cano.
Compañía Nacional de Teatro de México.
Elenco: Jesús Hernández, Óscar Narváez, Nara Pech, Adriana Resendiz, Nicté del Carmen, Mireya González, Irene Repeto, Fernando Sakanassi, Carlos
Alberto Santiago, Zabdi Blanco, Federico Lozano, Shadé Ríos, Mariana Villaseñor, Iván Zambrano Chacón, Yurief Nieves, Mario Vera y Andalucía.
Festival Castillo de Niebla, 12 de julio. Festival de Olmedo, 18 de julio.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
¿Tienes una suscripción de empresa? Accede aquí para contratar más cuentas.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.
Sobre la firma
