La historia íntima de Camila Sosa Villada en prosa y en verso

La fabulosa proliferación de libros con y sobre cosas reales, testimonios, hechos, crónicas, vivencias, exploraciones íntimas o confidenciales ha puesto contra las cuerdas algunos de los criterios históricos de valoración literaria. No es un fenómeno nuevo, evidentemente, pero sí es nueva la cantidad exorbitante y feliz de libros publicados con la carga del testimonio real y veraz expuesta como condición de existencia misma del libro. Javier Cercas ha dicho más de una vez en público y en privado que es una solemne bobada ese aviso tan usual en libros y películas de “basado en hechos reales” porque toda ficción está basada en hechos reales.

El hecho de que una obra esté invenciblemente enraizada en “hechos reales” no impide sin embargo que el nivel de manipulación, articulación y destilación de ese hecho real pueda ser tan distinto como la distancia que va de Madame Bovary —y Flaubert como protagonista absoluto diferido— a Volver la vista atrás, de Juan Gabriel Vásquez, donde las operaciones literarias se ajustan de forma escrupulosa a una veracidad fáctica que el propio Cercas ha practicado de forma pionera al menos desde Soldados de Salamina y, sobre todo y más radicalmente, desde Anatomía de un instante.

Vale, perdón, y voy a lo que voy: estos dos libros de Camila Sosa, pero también la potentísima novela Las Malas o los relatos de Soy una tonta por quererte caen inequívocamente en el segundo esquema literario y sin que falle en absoluto su calidad literaria, las obras están ancladas en vivencias propias u observadas que nutren ese libro de forma directa y casi explícita. En realidad, los dos breves libros que publica ahora en España la editorial Tusquets (pero llevan ya varios años circulando por Argentina, donde la autora es una especie de celebrity) están en el origen de su trayectoria escrita: su primer (y diría que único) poemario, en verso y prosa, La novia de Sandro y una suerte de testimonio autobiográfico, también anterior a la recreación literaria de su peripecia, El viaje inútil.

Hablamos de la historia íntima y traumática de un niño criado en un pequeño pueblo de la provincia de Córdoba que un día a sus 13 años decide vestirse de mujer, ser travesti (o trava, como le gusta a ella decirlo) y así va a seguir el resto de su vida sin ninguna facilidad, sin apoyos ni ayudas, sin auxilio y frente a una incomprensión feroz, alcohólica y violenta de su padre, con su etapa de prostitución y su tiempo posterior de salvación a través del teatro, el cine, la escritura y la pura y desbordante energía vital.

Su voz es a menudo desgarrada y dramática, ella ha dicho alguna vez que cursi (yo no le veo cursilería alguna) y tiene el poder de atrapar, sobre todo y con diferencia en los poemas y las prosas poéticas y crudísimas de La novia de Sandro, los malos pasos del deseo, la brutalidad de algunos hombres, el secretismo hipócrita de muchos otros y el doloroso transcurso del pasado revivido en el presente de una literatura que es singularmente suya.

El viaje inútil

Camila Sosa Villada
Tusquets, 2025
112 páginas
18 euros

La novia de Sandro

Camila Sosa Villada
Tusquets, 2025
88 páginas
18 euros