En las últimas décadas se ha roto el tabú de la salud mental, y cada vez más gente busca acompañamiento terapéutico y reconoce que necesita ayuda para encontrarse bien y enfrentar las cicatrices que le ha ido dejando la vida. Y eso es bueno. Para esas personas y para su entorno. Pero hay que saber elegir con lo que te quedas.
La exaltación de las tradiciones, la familia y las celebraciones con personas a las que no siempre soportas, se vuelven una ‘escape room’ de la que cada vez más gente huye. Y no me extraña
La primera generación de mujeres que se desentendió en masa de la forma de vivir de sus madres empieza a cumplir los 50, esa edad que supone la frontera indiscutible de la juventud. Pero igual no queremos seguir siendo jóvenes. Igual lo que queremos es crear una forma nueva de envejecer
Irantzu Varela, Premio Arco Iris y el Premio Pluma reflexiona sobre heterosexualidad y lesbianismo “elegido” en el Día de la Visibilidad Lésbica