Ir al contenido
_
_
_
_

¿Se ha perdido? Pronto el móvil será su guía

Desde al móvil se puede acceder a un servicio que indica cómo llegar a restaurantes, hoteles y sitios turísticos de Tokio y da información sobre ellos

Es algo así como una varita de zahorí para la era de la información. Hoy en día, si se encuentra en una esquina de Tokio, puede apuntar con un móvil especial hacia un hotel, un restaurante o un monumento histórico y con sólo apretar un botón el aparato le mostrará información de Internet describiendo el objeto que busca.

El nuevo servicio se ha logrado gracias al esfuerzo conjunto de tres empresas japonesas y de GeoVector, una pequeña compañía tecnológica estadounidense, y representa el eslabón perdido entre el ciberespacio y el mundo físico. Los teléfonos combinan un navegador vía satélite, con información precisa sobre un espacio comprendido en un radio de unos 10 metros, y una brújula electrónica que añade una nueva dimensión a la orientación. Si conectan el aparato a Internet podrán trasladar al mundo real el sencillo método de apuntar y pulsar en una pantalla de ordenador.

El sistema se ha implantado por primera vez en Japón porque en este país, a partir del año próximo, la reglamentación en materia de seguridad exigirá que todos los teléfonos móviles puedan recibir señales de GPS para determinar su ubicación.

En Estados Unidos los proveedores pueden optar por una tecnología de localización menos precisa, que deduce la posición de un aparato a partir de su proximidad a los repetidores de telefonía, un método cuya exactitud se limita a un radio de unos 90 metros.

Sólo dos operadores estadounidenses utilizan tecnología GPS y ninguno ha anunciado planes para incorporar brújulas. En consecuencia, los analistas dicen que Japón sacará una ventaja de varios años en lo que para muchos será una nueva frontera en el mundo de los artefactos móviles.

"La gente subestima el poder de la búsqueda geográfica", afirma Kanwar Chadha, director ejecutivo de Sirf Tecnology, una empresa de Silicon Valley que fabrica equipos de navegación con dispositivos vía satélite. La idea se les ocurrió a los fundadores de GeoVector, John Ellenby y su hijo Thomas, una noche de 1991 cuando navegaban en un velero por la costa de México. Para compensar la mala orientación del mayor de los Ellenby, los dos decidieron que si se combinaban las capacidades de una brújula, un receptor de GPS y unos prismáticos se podría apuntar simplemente hacia un objeto o hito para la navegación con el fin de identificarlo. Ahora esa idea está cobrando forma comercial en los teléfonos japoneses, que utilizan programas y tecnología desarrollada por los Ellenby.

El sistema proporciona ya descripciones detalladas o anuncios sobre más de 700.000 lugares de Japón, que el móvil recibe a través de Internet. Hace poco, uno de los suscriptores del servicio, Koichi Matsunuma, caminaba entre la multitud por el centro comercial de Shinjuku, atestado de neones, con los ojos fijos en su móvil plateado mientras se abría paso por callejas estrechas. Una flecha situada en la pequeña pantalla le indicaba el trayecto hasta su destino, un hotel para ejecutivos.

"Ahí está", dijo Matsunuma, un oficinista de 34 años que trabaja en un centro universitario de Tokio donde se enseña música. "Ahora, lo que espero es que esta pantalla me permita también hacer reservas".

Matsunuma nos enseña cómo funciona el servicio en una calle de Shinjuku. Selecciona "alojamientos" en la pantalla. Después apunta el teléfono hacia un conjunto de edificios bastante altos. Ante él se despliega una lista de hoteles, con sus distancias, y elige el más próximo. Aparece una flecha para indicarle el camino y en la esquina superior izquierda el marcador del número de metros se va reduciendo a medida que avanza. Otro click y accede a un mapa que le muestra tanto su propia ubicación como la del hotel.

La idea de apuntar y pulsar puede solucionar uno de los efectos secundarios más molestos que puede tener la publicidad inalámbrica local. Los ejecutivos de las empresas temen que los correos basura les inunden los móviles y otros artefactos portátiles en el futuro.

Con la tecnología GeoVector el control lo tiene el usuario, que sólo accede a la información del lugar que busca. Microsoft financió el desarrollo de GeoVector hace unos años. "Creemos que somos el santo grial para la búsqueda local", afirma Peter Ellenby, otro de los hijos de John Ellenby y director de nuevos medios en GeoVector. En la actualidad, el servicio de esta empresa, introducido comercialmente este año en Japón por KDDI, un operador de móviles, asociado con NEC Magnus Communications, proveedor de servicios en red, y Mapion, una compañía que distribuye información cartográfica por Internet, está disponible en tres tipos de teléfonos de Sony Ericsson.

Patrick Bray, representante de GeoVector en Japón, calcula que se han vendido entre 1,2 y 1,5 millones de aparatos. GeoVector y sus socios afirman que no saben cuánta gente usa actualmente el servicio, porque es gratis y se utiliza a través de un portal de Internet público. Pero señalan que en septiembre tienen previsto ofrecer otro exclusivo para abonados, con una base de datos más amplia y mapas más precisos.

En Estados Unidos aún no se ha desarrollado este mercado. Versión y Sprint Nextel son los únicos operadores grandes del país que han puesto receptores de GPS en sus móviles.

"El problema principal son los operadores", afirma Kenneth L. Dulaney, un analista del sector inalámbrico de Gartner Group, que añade que, aunque algunas empresas de telefonía móvil están ofreciendo aparatos con programas basados en tecnologías de localización, ninguno se ha aprovechado de sus posibilidades. "No parecen muy perspicaces".

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

¿Tienes una suscripción de empresa? Accede aquí para contratar más cuentas.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_