El Gobierno balear se compromete a prohibir las corridas de toros

El Ayuntamiento de Palma de Mallorca ha asegurado este jueves que tiene el compromiso del Gobierno balear para hacer las modificaciones legislativas pertinentes para evitar que se vuelvan a celebrar "eventos que enaltecen el maltrato animal como son las corridas de toros", compromiso del que se sienten muy satisfechos.

La Corporación local, compuesta por socialistas y nacionalistas —como el Gobierno autonómico—, aprobó una moción para declarar Palma de Mallorca como ciudad antitaurina, aunque no puede prohibir las corridas porque la licencia es autonómica.

Después de varias inspecciones en la Plaza de Toros, el Ayuntamiento ya ha avanzado que abrirá más de un expediente sancionador a los gestores de la plaza por existir "múltiples deficiencias". Estas infracciones se refieren al estado de las vallas, de la enfermería y de los corrales, además de otras cuestiones, que aunque no justifican el cierre, sí pueden motivar expedientes sancionadores.

En referencia a la corrida de toros que tendrá lugar este jueves en el albero balear, Palma asegura haber trabajado "intensamente" las últimas semanas para que el evento se haga con "las máximas garantías" que dictan el reglamento taurino y las normativas municipales.