Detenidos por sospecha yihadista dos jóvenes que iban a correr un triatlón

La denuncia del padre activó todas las alarmas. Convencido de que su hijo “andaba con malas compañías” se presentó en comisaría hace unos días y dijo que había salido hacia Turquía con un amigo y que creía que iba a alistarse en el Estado Islámico (Dahes). La alarma existente ante el yihadismo hizo el resto. Y esta mañana las autoridades turcas los mandaban de vuelta en un vuelo de Turkish Airlines que aterrizó en Barajas a las 11.10 horas. “No hay nada de nada”, confirman en la Comisaría General de Información de la policía. “Simplemente llegó una información y se investigó”, explican, sin querer dar más detalles. Los chicos, “dos personas normales”, han sido puestos en libertad sin cargos.

Al parecer, los chavales, un español y otro de origen marroquí, pretendían participar en una competición de triatlón, pero el padre de uno de ellos no aprobaba el viaje. El estricto control que mantiene la policía española sobre los movimientos de los posibles combatientes españoles que viajan a zonas de conflictos armados y especialmente a la zona de influencia del Estado Islámico en Siria e Irak provocó la deportación por parte de las autoridades turcas, previamente avisadas, aunque una vez en España se comprobó que ninguno de los dos extraditados tenía relación con movimientos yihadistas.

En los últimos meses son varios los españoles que han sido detenidos por participar en contiendas. En febrero, la policía detuvo a ocho brigadistas procedentes de Ucrania, acusados de de comprometer la paz y la independencia de España, de posible cooperación en homicidio o asesinato y de tenencia y depósito de armas de guerra. Las pruebas contra ellos eran las propias fotos y videos que colgaron y exhibieron en las redes sociales en las que se les veía con armas y realizando entrenamientos militares. Quedaron en libertad con cargos. Además a finales de marzo los Mossos detenían a una familia que pretendía enviar a sus hijos a hacer la yihad a Siria y, a finales de año, tres residentes de Barcelona eran arrestados en Bulgaria cuando trataban de llegar a Siria para alistarse en las filas del Abu Bakr al-Baghdadi, el autoproclamado califa del EI.

Varias células yihadistas han sido desactivadas en las últimas semanas. Sin ir más lejos, el pasado ocho de abril los Mossos detenían a 11 integrantes de una organización islámica que presuntamente pretendía atentar en Cataluña. Y esta misma semana, otras dos personas eran arrestadas también en Cataluña por hacer propaganda y difundir ideario yihadista. Estas últimas también han quedado este jueves en libertad, aunque siguen imputados por enaltecimiento del terrorismo.