Mohamed VI excarcela a 48 presos españoles a petición de don Juan Carlos

El rey Mohamed VI de Marruecos indultó este martes, con motivo de la Fiesta del Trono, a 1.044 presos entre los que figuran 48 españoles condenados casi todos por tráfico de droga. Los primeros reos españoles fueron excarcelados a última hora de la tarde. El monarca alauí quiso resaltar la puesta en libertad de los reclusos españoles. El palacio real difundió un comunicado en el que señala que durante su reciente visita a Marruecos don Juan Carlos pidió a Mohamed VI que accediese a conceder “su gracia a 48 ciudadanos españoles condenados por diferentes tribunales del Reino”.

“Su Majestad el Rey, que Dios le glorifique, ordenó la liberación de ese grupo de presos españoles con motivo de la gloriosa Fiesta del Trono”, concluye el texto. La fiesta que se celebra hoy conmemora la entronización de Mohamed VI como rey de Marruecos en 1999. En años anteriores los presos españoles fueron excarcelados, a veces en mayor número, sin que el palacio real emitiese ningún comunicado.

Al conocer que el soberano alauí había accedido a su petición don Juan Carlos le llamó por teléfono para agradecerle “profundamente” su gesto, según indicaron fuentes de la Casa del Rey de España. Se trata de “una muestra singular de amistad entre los dos pueblos”, precisaron. El monarca español alabó de paso “los avances” que, durante el reinado de Mohamed VI, “ha experimentado el Reino de Marruecos en todos los ámbitos”.

Don Juan Carlos también intercedió este mes en Rabat para que se desbloqueen los procesos de kafalas (modalidad de adopción islámica) de niños marroquíes que han iniciado, a veces hace ya dos años, 61 familias españolas, pero en este ámbito parece haber tenido por ahora menos éxito. La mitad de las familias tienen sentencias firmes de adopción, pero no han logrado el permiso de salida del país con el niño tutelado. La otra mitad, concentrada en las ciudades de Casablanca y Agadir, aún está a la espera de una sentencia favorable.

En su discurso del Trono Mohamed VI resaltó su empeño por ahondar aun más la relación de Marruecos España y Francia y arremetió, como suele ser habitual, contra Argelia a la que achacó la “responsabilidad” del callejón sin salida en el que se encuentra sumido el conflicto de la antigua colonia española del Sáhara Occidental.