Vocales del Poder Judicial estudian exigir responsabilidades a Dívar

Los vocales del Consejo General Poder Judicial celebraron este miércoles una reunión en la que estudiaron la posibilidad de pedir explicaciones al presidente del organismo y del Tribunal Supremo, Carlos Dívar, por los 20 viajes de cuatro o más días que realizó a Puerto Banús desde noviembre de 2008 a marzo de este año.

La reunión tuvo un carácter espontáneo cuando cuatro de los vocales estaban a punto de asistir a la reunión de la Comisión Permanente que tuvo que ser aplazada. Poco a poco fueron llegando al despacho del secretario general del CGPJ, Celso Rodríguez Padrón, los otros vocales que ayer se encontraban en el Consejo. En un determinado momento se encontraban presentes 14 vocales, según el cómputo que iba realizando la vocal Almudena Lastra, y que llegó a decir “ya tenemos quórum”, según fuentes de los asistentes. Algún vocal que no se encontraba en ese momento en el edificio del Consejo fue informado posteriormente del contenido de la reunión.

Todas las fuentes consultadas coinciden en que independientemente de la denuncia por malversación de caudales públicos, que ha originado unas diligencias informativas que tramita el teniente fiscal del Tribunal Supremo, Juan José Martín Casallo, el presidente del Consejo, Carlos Dívar, no ha dado ninguna explicación a los vocales.

Es verdad que cuando se publicó la noticia, ninguno de los vocales quiso salir a defender a su presidente y le dejaron solo, en el bien entendido caso de que 20 viajes de fin de semana de cuatro días a un lugar como Marbella, que no es precisamente la capital judicial de España, tienen difícil explicación para justificarlos como viajes oficiales. “Se trata de actos privados del presidente y debe ser el propio Dívar quien salga al paso de las acusaciones”, alegaron entonces.

Sin embargo, algo ha cambiado. Los vocales entienden que, sin interferir en la labor del fiscal al que le corresponde depurar la posible responsabilidad penal de Dívar, este debería dar explicaciones al Consejo del Poder Judicial, es decir, que deben exigirle responsabilidades políticas.

A la espera de que la fiscalía se pronuncie, la mayoría de los vocales no quiere que la imagen de gasto suntuario que proyecta Dívar alcance al resto de los integrantes del Consejo. Las discrepancias surgen a la hora de concretar la forma de pedirle cuentas.

Los vocales se plantearon varios escenarios en los que, entre otros, se barajó incluso la posibilidad de convocar un pleno extraordinario en el que de forma monográfica se tratase el caso de los viajes del presidente Dívar. Otros, en cambio, prefieren esperar y ver. Esperar a que el fiscal se pronuncie sobre el caso y actuar en consecuencia.

El fiscal del Estado, Eduardo Torres-Dulce, declaró este miércoles que “tomará con prontitud” una decisión sobre la denuncia por malversación contra Dívar “ante los delicados intereses” que hay en juego. Algunas fuentes del Consejo interpretan que esa decisión podría estar lista a finales de esta semana o principios de la próxima.

Por ello, algunos vocales son partidarios de actuar a la vista de lo que haya resuelto el fiscal. Si presentase querella ante la Sala Segunda, la postura del Consejo sería muy sencilla. Si por el contrario decidiese archivar las diligencias, dependería de la forma de hacerlo. No es lo mismo que simplemente se diga que los hechos no encajan en el tipo penal de malversación, que se diga que los hechos han ocurrido y aunque reprobables no son delito, o que se rechace de plano la denuncia.

Por ello, los vocales han decidido reunirse el martes o el miércoles de la próxima semana para adoptar la forma de reclamar a Dívar unas explicaciones que, por el momento, no se ha dignado a ofrecer a los vocales que preside