La “hombría” de Camps impresiona a la alcaldesa de Valencia

La alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, ha preferido no vaticinar un veredicto sobre el expresidente de la Generalitat, Francisco Camps, y el ex secretario general del PP valenciano, Ricardo Costa, mientras el jurado está deliberando si es culpable o no de un delito de cohecho impropio. “Es un momento especialmente para callar”.

La alcaldesa, cuyo nombre irrumpió en una de las sesiones del juicio, cuando se oyó la grabación en el que el cabecilla de la trama en Valencia, Álvaro Pérez, El Bigotes, hablaba de los regalos que le hacían, ha asegurado esta mañana que habla “muchísimo con Francisco Camps”, quien, tal como ha señalado la "tiene impresionada”. “Está dando talla de gran hombría”, ha añadido. No obstante, fue la alcaldesa quien el pasado 20 de julio, el día en que Camps presentó su dimisión como presidente de la Generalitat, dijo: "Está muerto, está muerto", tal y como pudo captar una cámara.

Rita Barberá también ha respondido a la extraña presencia de un miembro del PP, que ha sido uno de los asiduos a las 26 sesiones del juicio, en la terraza del hotel en el que se aloja el jurado. La alcaldesa, visiblemente molesta, ha dicho no tener “ni idea” de qué hacía Carlos Lirio en ese establecimiento pero, no obstante, ha señalado que no le ha gustado "ver la foto”.

Mientras tanto, los nueve miembros del jurado popular siguen deliberando. Solo deben contestar a las preguntas del cuestionario que les entregó el magistrado Juan Climent: Si Camps y Costa recibieron regalos de la trama Gürtel y si se los hicieron en condición de autoridad.