Tres días solo para afrontar la muerte
Los lectores escriben sobre las bajas por fallecimiento de un familiar, la oferta de Netflix, el respeto entre políticos y la ayuda ofrecida por EE UU tras el terremoto en Myanmar
Hace dos semanas, mi madre falleció de repente. Mi padre murió hace años. Mi hermano y yo nos encontramos de golpe con un duro duelo y múltiples gestiones burocráticas que realizar. Para hacerlo, teníamos tres días de permiso. ¿En tres días se realiza un duelo y se pone en orden toda la información necesaria para gestionar el fallecimiento y culminar la sucesión? Mi hermano es médico internista; su mujer trabaja en paliativos. ¿En tres días una persona que carga con el luto de la muerte de un progenitor es capaz de tratar a sus pacientes terminales? Lo mismo el resto: ¿en tres días estamos todos listos para lidiar con el estrés de entregas y encargos? No entiendo a qué esperan los partidos progresistas para mandar al Congreso una propuesta de baja por fallecimiento de familiares cercanos de uno a cuatro meses, como existen las bajas maternales y paternales. Solo se te mueren los padres una vez en la vida. Y esto debería contemplarlo el Estado.
Ana Haro. Majadahonda (Madrid)
El algoritmo de Netflix
Historias de secuestros, acosadores, sectas religiosas, porno soft en series ambientadas en la Edad Media o un romanticismo empalagoso. No sé qué ver. Hace tiempo que la oferta de Netflix ya no me convence. Se supone que el algoritmo me ofrece opciones alineadas con mis gustos, pero tengo mis dudas. Será que la plataforma quiere sembrar miedo, hacernos perder la fe y anhelar el modelo de familia tradicional.
Katerina Kliwadenko Richaud. Valdivia (Chile)
Carmena y el respeto al rival
Leyendo la genial entrevista del domingo a Manuela Carmena, de Berna González Harbour, veo que la exalcaldesa, a la que muchos madrileños añoramos, echa de menos que sus compañeros de viaje en la política no supieran ceder y escuchar a los demás. Me paro a pensar que este es el pilar de la democracia que ella tanto defiende a capa y espada: escuchar y ceder cuando es necesario. Con lo fácil que parece y vemos cómo, cada vez con más frecuencia, las democracias se sustentan en el enfrentamiento continuo y el cacareo constante entre unos parlamentarios y los que tienen enfrente. Sin respeto, escucha y empatía, los pilares de la democracia saltarán por los aires. Y no es el momento de poder permitírnoslo.
Jorge Todolí. Madrid
La ayuda de EE UU a Myanmar
Después de que el Gobierno estadounidense, mediante la motosierra de Musk, haya desmantelado su principal agencia de ayuda humanitaria (USAID), y después de lo ocurrido con el apoyo que brindó en su momento a la Ucrania invadida, ahora, ante el letal terremoto en Myanmar y Tailandia, que ya supera los 2.000 muertos, hay que preguntarse si la magnánima ayuda que EE UU ha ofrecido raudamente irá acompañada, pasado un tiempo, de la factura de los costes con los intereses correspondientes.
Jorge Álvarez Yágüez. Gondomar (Pontevedra)
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