El botín
El terrorismo deja de practicarse cuando las circunstancias lo aconsejan o logra sus objetivos por otros medios. Pero haber matado a un semejante no es tarea circunstancial


Dijo Mario Calabresi, hijo del comisario Calabresi asesinado por el terrorismo de extrema izquierda, que se puede ser un exterrorista pero no un exasesino. El terrorismo deja de practicarse cuando las circunstancias lo aconsejan o logra sus objetivos por otros medios. Pero haber matado a un semejante no es tarea circunstancial, cosa de un día: ser asesino te marca para siempre, te convierte en alguien distinto. El terrorismo puede olvidarse pero el crimen siempre te acompaña, está a tu lado como el primer día. El crimen de Lotta Continua o ETA no es nunca un gesto individual sino la culminación de un proyecto colectivo: asesino es el ejecutor, quien ordenó el crimen, quien informó de las costumbres de la víctima, quien ayudó o encubrió al ejecutor. Y por supuesto asesinos son también quienes justificaron o “comprendieron” el asesinato y sobre todo los que se beneficiaron políticamente del terror. En Euskadi hay muchos exterroristas que han encontrado empleos mejores, pero los asesinos siguen siendo asesinos, aunque nunca les hayan acusado formalmente de ese delito ni se hayan sentado jamás ante un juez. Es ingenuidad o hipocresía escandalizarse porque EH Bildu presente en sus listas personas vinculadas a ETA. ¿Siete? ¿Cuarenta y cuatro? No: todos pertenecen a esa mafia, aunque con cinismo hayan dicho que “ahora ya no toca”.
Han pasado 26 años de la inicua ejecución de Miguel Ángel Blanco. Se inventó otra memoria, según la cual ni los terroristas son ya lo que fueron ni a los asesinos se les puede echar en cara lo que siguen siendo. Debemos negarnos a esa farsa. No solo las víctimas individuales, sino los españoles, porque la gran víctima de ETA fue la España democrática. ¿Que los terroristas ya no ejercen? Será que no les conviene. Pero los asesinos siguen siendo asesinos. No debe permitirse que rentabilicen democráticamente el botín de su crimen.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
¿Tienes una suscripción de empresa? Accede aquí para contratar más cuentas.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.
Más información
Archivado En
Últimas noticias
Al menos dos muertos y ocho heridos en un tiroteo en la universidad de Brown, en Estados Unidos
‘Los domingos’, en cine, y ‘Anatomía de un instante’, en serie, ganan en los premios Forqué 2025
Hamás acusa a Israel de “socavar el alto el fuego” en Gaza al atacar al número dos de su brazo armado
Pedri dirige y Raphinha ejecuta en el Barça de Flick
Lo más visto
- Guardiola elimina la prohibición de que los jefes de servicio de la sanidad pública ejerzan en la privada y sube un 59% la derivación de pruebas
- El jefe de la misión de rescate de María Corina Machado: “Fue una de las operaciones de mayor riesgo en las que he participado”
- Sin duchas ni camas adecuadas, y con obras en marcha: así estrenaron 30 niños extranjeros el centro de acogida de La Cantueña de Ayuso
- Rusia eleva la presión sobre la UE con una demanda para evitar que financie a Ucrania con sus activos congelados
- Los 50 mejores libros de 2025






























































