México suma 23 casos de miasis por gusano barrenador en humanos

Ya suman 23 los casos por enfermedad de miasis en humanos en México, causada por el gusano barrenador del ganado (GBG), de acuerdo con la información registrada por la Secretaría de Salud en su boletín informativo publicado este miércoles, correspondiente a la semana epidemiológica 24. De acuerdo con este informe, hasta el 20 de junio, 23 personas de entre 17 y 86 años han sido registradas con la enfermedad de Miasis por Cochliomyia hominivorax, principalmente en el estado de Chiapas —con 21 de los casos— y en Campeche.

De los registros, 13 de los pacientes continúan en hospitalización, dos se reportan estables con tratamiento ambulatorio y ocho ya fueron dados de alta. Del total de casos acumulados, 17 son hombres y en la mayoría de los pacientes, las áreas que se reportaron mayormente afectadas fueron en la cabeza y en el miembro inferior izquierdo. De acuerdo con esta información, son 12 los municipios chiapanecos los que concentran la mayoría de casos, sobre todo en Tapachula, ubicada a unos 380 kilómetros de Tuxtla, la capital del Estado.

Juan Carlos Anaya, director general del Grupo Consultor de Mercados Agrícolas (GCMA) ha añadido, en una entrevista este miércoles en Fórmula Noticias, que desde noviembre de 2024, cuando oficialmente se registró la aparición de nuevos casos en el sur México, el número de casos positivos que se han registrado han sido 2.398 de los que 2.048 ya han sido cerrados y quedan pendientes 350. “Una de las medidas que ha tomado Agricultura y el Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica) y la Secretaría de salubridad, conjuntamente con las medidas del Gobierno de Estados Unidos, es la vigilancia y la concientización del GBG. No es mortal, siempre y cuando se pueda atender a tiempo”, dijo.

La miasis es una infestación producida por larvas de moscas que se alimentan de tejido vivo de mamíferos, incluidos los humanos. La especie cochliomyia hominivorax es la causante principal de esta enfermedad. Las moscas depositan sus huevos en heridas abiertas o lesiones de los animales, y las larvas se desarrollan alimentándose del tejido vivo, en un recorrido que “barrena” lo que encuentra a su paso incluso hasta llegar al hueso. Especialistas aseguran que, además, las larvas también pueden depositarse en tejidos blandos y orificios naturales como la nariz, la boca o los oídos.

El riesgo de contagio en humanos es bajo, pero aumenta en áreas rurales donde las personas tienen contacto cercano con animales infectados.

Desde abril pasado, esta reinfestación ha provocado una disputa entre los Gobiernos de México y de Estados Unidos, después de que la frontera norte se cerrara al ganado mexicano para evitar que la enfermedad llegara al territorio del norte. Esta decisión ha ocasionado una movilización de autoridades de ambos lados para retener el avance de la enfermedad. Estados Unidos ha anunciado que reabrirá la fábrica de moscas estériles en Chiapas, y que creará una nueva en el sur de Texas, entre otras medidas.