Las salidas de tono de Noroña incomodan a Morena y dan gasolina a la oposición

Gerardo Fernández Noroña, presidente del Senado mexicano e integrante de Morena, sigue protagonizando episodios incómodos para su partido. El legislador, conocido por su carácter desenfadado y peleón, parece resistirse a cambiar el chip de opositor, lugar que ocupó durante décadas. En medio de la crisis bilateral entre México y Estados Unidos por las protestas de migrantes en Los Ángeles, el senador ha estirado un poco más la liga, ya bastante tensa entre los dos gobiernos, provocando incluso la intervención de la presidenta, Claudia Sheinbaum. El enfrentamiento con el senador republicano, Eric Schmitt, por la eventual imposición de impuestos a las remesas que los connacionales envían a México, lo ha vuelto a colocar en el centro de la polémica.

La respuesta sarcástica del morenista a la propuesta del estadounidense de gravar los envíos de dólares ocasionó una reacción inmediata. El republicano respondió que el impuesto aumentaría de 3,5% a 5%. Esta acción ha ocasionado que la sociedad civil y los partidos de oposición (PAN y PRI) pongan sobre la mesa su destitución de la presidencia del órgano legislativo. El tema ha escalado hasta Palacio Nacional, Sheinbaum ha llamado a la serenidad con la advertencia de que la confrontación no ayuda a resolver los diferendos.

Noroña llegó a las filas del partido gobernante de rebote, para cumplir con el requisito que le permitiera ser nombrado presidente del Senado, lugar que obtuvo ejerciendo presión sobre Morena. Reclamaba no haber sido considerado en el gabinete presidencial tras la victoria de Sheinbaum, y que de acuerdo con la premiación que hizo el partido le correspondía por alcanzar el tercer lugar de la contienda. Noroña había participado como candidato bajo la bandera del PT desde hacía años, aunque nunca formó parte de su militancia.

Noroña revolvió todo para conseguir su premio de consolación, la presidencia del Senado, cargo que le dieron ante el asombro de morenistas y bajo la promesa de registrarse como integrante del partido, de acuerdo a líderes del PT consultados. La inscripción a las filas de Morena se oficializó en febrero en medio de una campaña masiva de afiliación encabezada por Luisa María Alcalde y por Andrés Manuel López Beltrán, presidenta y secretario de organización del partido, respectivamente.

Los tropiezos han sido varios. Su insistencia en llamar a Sheinbaum presidente, y no presidenta, erosionó la relación con la mandataria. Adicionalmente, su actuación como presidente del Senado ha despertado críticas, incluso entre sus compañeros de bancada, que no llevan bien sus salidas de tono, sostienen senadores y diputados. Además, está la animadversión que se ganó de sus excompañeros del PT, que lo consideran un traidor.

Su último episodio ha costado caro. Aunque tenga tintes de amago, ha confrontado a uno de los integrantes del partido de Trump, que además tiene mayoría en el Congreso. “Un senador estadounidense dice que le van a poner 15% a las remesas. ¡Ay, estás viendo y no ves senador!”, dijo. La respuesta de Schmitt fue inmediata. “El presidente del Senado mexicano está muy molesto por mi proyecto para cuadruplicar el impuesto a las remesas. ¿Adivina qué? El impuesto acaba de subir un 5%”, publicó en su cuenta de X. Hubo réplica, Noroña criticó al republicano por celebrar una idea que no es suya.

Los desplantes de Noroña han llevado a líderes del PAN y del PRI a pedir su dimisión del cargo. “Le hace mucho daño al país el protagonismo estéril de Noroña”, dijo este miércoles Federico Döring, vicecoordinador de la bancada panista en la Cámara de Diputados y confirmó que el PAN hará una solicitud formal al Senado. Alejandro Moreno, dirigente del PRI y senador, se ha pronunciado en el mismo sentido. “No se trata de un tropiezo aislado. Es un patrón de improvisación, arrogancia y desprecio por la diplomacia”, dijo en un video publicado en redes sociales.

A la intención se han sumado una treintena de activistas, entre ellos Cecilia Flores, buscadora de desaparecidos; así como otros activistas como Bryan y Adrián LeBarón, quienes han enviado una carta a Sheinbaum para exigir la renuncia de Noroña. “Ha cruzado una línea que no se puede ignorar. Sus palabras no solo ofenden; hieren, dividen y, peor aún, traicionan el mandato de representar con dignidad a los mexicanos”, se lee en la misiva.

Con este contexto, Sheinbaum ha llamado a la serenidad y lo mismo ha hecho la dirigencia de Morena. “Que todo el mundo se serene. La confrontación no ayuda”, dijo durante su conferencia mañanera. “Tenemos que buscar siempre el bienestar de nuestra nación, ese es el papel de todo representante popular”, remató sin nombrarlo.

Noroña ha mesurado el tono al final de la tarde, aunque antes de recular ha acusado “una campaña de insidia” en su contra. “Quiero ratificar mi convicción de diálogo con el Senado, el Gobierno y el Congreso de EE UU para lograr respeto pleno a los derechos humanos de los migrantes y que esta medida que implicaría una doble tributación, se logre retirar”, dijo este miércoles en la sesión de la Comisión Permanente. Como sea, Noroña tiene los días contados en la presidencia del Senado. El cargo caduca el 31 de agosto, con la conclusión del primer año de la 66 Legislatura.