“Quería gritar: ‘Quiero vivir en paz”
Farah, una tuitera de 16 años que ha contado desde Gaza la ofensiva, suma 172.000 seguidores
Con sus dedos rápidos y su smartphone, Farah Baker, de 16 años, se ha convertido en la cronista ciudadana más seguida de Gaza. Su cuenta de Twitter, que antes de la ofensiva militar rozaba los 800 seguidores, tiene más de 170.000 seguidores. Farah no es periodista, intelectual ni portavoz de nadie. Es una adolescente de 16 años de ojos azules, que no luce velo sino mallas y que habla inglés. Durante el último mes le ha contado al mundo —en inglés— lo que veía y lo que oía, descripciones sin intermediarios de cómo se vive el asedio desde dentro, usando una de las redes sociales más potentes del mundo, en un idioma universal, adjuntando fotos y vídeos y emoticonos que rompen con la imagen estereotipada de la mujer gazatí.
Farah (@Farah_Gazan) tiene prisa, porque con la tregua en vigor llega la calma y eso le permite salir y ver a sus amigos tras un mes de encierro. Y reírse con ellos. Y plancharse el pelo de nuevo. Explica, en una entrevista mediante mensajes privados por Twitter, que está “sorprendida” por el enorme seguimiento de sus textos. Hija de un neurocirujano del hospital Al Shifa, el más importante de Gaza, vive cerca del centro médico, así que se decidió a ir narrando todo lo que ocurría alrededor con palabras sencillas y sin estridencias. “Yo no puedo empuñar un arma, yo no soy política, así que la manera que tengo de ayudar es contar lo que veo”, asegura. Su historia se multiplica con una media de mil retuits por mensaje. Tiene seguidores en 160 países.
Empezó sacando el móvil por su ventana. Luego se fue arriesgando a bajar a las calles. El generador de gasolina que su familia sí puede pagarse le permitía tener conexión a Internet y seguir narrando sus vivencias. Cada vez tenía la conciencia más sublevada. “En otras guerras yo no tenía claro lo que pasaba ni me sentía amenazada como civil. Ahora sí. Atacan a todo. Todos somos vulnerables. Yo sólo quería compartirlo en algún lado y gritar que quiero vivir en paz. Si sirve, es una alegría para mí”, abunda. Ahora es estudiante de instituto —vuelve a las clases en un mes—, pero su deseo, explica a Reuters, es ser abogada, para seguir ayudando a su pueblo.
Sus mensajes son de todo tipo. Desde reflexiones frenéticas que, reconoce, escribió a puro miedo — “No puedo parar de llorar. Podría morir esta noche”—, a descripciones de cómo un ataque altera su vida. —desde los cristales que dañan a su hermana de seis años a la almohada con la que tapa su cabeza para amortiguar el ruido—. Hay indicaciones de por dónde suenan las sirenas —“ambulancia”, dice varias veces, pura economía del lenguaje que le servía para decir que otro herido llegaba a Al Shifa—, o desahogos anímicos —“Echo de menos el mar, mis amigos, el helado, la alegría y la diversión. Echo de menos mi vida normal”—. En sus vídeos, apunta indicaciones de los barrios donde han caído los proyectiles o se pregunta sobre el tipo de armas usadas. A más de un periodista le han venido bien sus indicaciones.
En los días de calma, Farah no cede. Explica cómo es el cerco de Gaza cuando no suenan las bombas, cómo “nunca” ha podido viajar a Cisjordania o Jerusalén, cómo se vive “sin poder escapar a otro lado o sin tener refugio en el que esconderte”.
Convertida en fenómeno, la joven ha sido entrevistada por los principales medios del mundo. Pero lleva con calma estar en el escaparate. “Sólo he contado cómo se ataca Gaza”, dice. Y no quiere volver a hacerlo. “Porque no quiero ser testigo de otra guerra”.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
¿Tienes una suscripción de empresa? Accede aquí para contratar más cuentas.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.
Archivado En
Últimas noticias
Festival Luces de Invierno: qué actividades se esperan y horario de los conciertos en el Zócalo de Ciudad de México
Las nuevas imágenes de Epstein publicadas por el Departamento de Justicia de Estados Unidos
Seis playas en México en donde no es seguro nadar en las vacaciones de invierno, alertan Semarnat y Cofepris
Un Barcelona de récord y líder gana al Baskonia un partido para la historia: 134-124
Lo más visto
- El Supremo condena a ‘Okdiario’ y a Eduardo Inda por intromisión en el honor de Iglesias al acusarle de cobrar de Venezuela
- Los pagos del Gobierno de Ayuso a Quirón engordan con facturas de hace una década y sin pagar desde tiempos de Cifuentes
- Más de 40 congresistas demócratas piden por carta a Trump que cese en sus “intentos de socavar la democracia en Brasil”
- La princesa Leonor realiza su primer vuelo en solitario como parte de su formación en el Ejército del Aire
- Última hora de la actualidad política, en directo | Gallardo: “Guardiola no quiso ir al debate ayer porque no podía hablar bien de lo que ha hecho a lo largo de estos dos años y medio”





























































