Un jurado declara culpable de asesinato y terrorismo al 'francotirador de Washington'

El francotirador que sembró el terror en el área de Washington DC el año pasado, John Allen Mohamed, ha sido declarado culpable de los delitos de asesinato, terrorismo, conspiración y uso de armas de fuego para cometer un delito por el jurado que ha examinado su caso en el Estado norteamericano de Virginia Occidental. El tribunal, compuesto por siete mujeres y cinco hombres y supervisados por el juez LeRoy Millette, deberá decidir ahora el castigo que le corresponde entre la cadena perpetua y la pena de muerte (en este último caso, deberá demostrarse que cometió al menos dos asesinatos en un periodo de menos de tres años).

El juicio a Mohamed, al que se le acusó del asesinato de diez personas en octubre de 2002, ha despertado gran expectación en Estados Unidos, en parte por el clima de miedo que causaron las muertes en su momento en el área, y en parte porque podría tratarse de la primera condena a muerte dictada en ese Estado bajo una ley antiterrorista promulgada el año pasado. El jurado le ha encontrado culpable de los cuatro delitos tras seis horas de deliberaciones.

El llamado francotirador de Washington resultó ser dos personas, en cualquier caso, puesto que Mohamed, de 42 años y veterano de la primera guerra del Golfo, contó en su trayectoria asesina con la ayuda de John Lee Malvo, un muchacho de 17 años, que según el fiscal efectuó la mayoría de los disparos.

Durante la investigación, la policía dedicó enormes recursos a buscar una furgoneta blanca en la que, supuestamente, viajaba en solitario un hombre de raza blanca. Esa búsqueda no condujo a ninguna parte: los francotiradores eran dos, de raza negra, y viajaban en un automóvil azul.