El ‘hype’ viste de Prada: una película viral antes de su estreno gracias a la nostalgia

“Es como ver a las diosas regresar al Olimpo”. Con esta metáfora, un tuitero mexicano comenta unas fotografías de Anne Hathaway, Meryl Streep y Emily Blunt tomadas durante el rodaje de El diablo viste de Prada 2 por Nueva York. Las tres actrices vuelven a ponerse en la piel de Andy Sachs, Miranda Priestly y Emily Charlton, respectivamente. Las redes sociales se llenan estos días de cientos de mensajes que anhelan la llegada de la secuela de la película que se convirtió en un fenómeno audiovisual hace justo dos décadas. Prácticamente un año antes de que llegue su estreno, previsto para mayo de 2026, los fans más nostálgicos reavivan el recuerdo de esta historia que aborda las luces y sombras de la industria de la moda. Lo hacen viralizando vídeos en los que comentan los looks que ya se han podido ver por las calles de Manhattan, las posibles tramas o cómo han cambiado físicamente los protagonistas de la cinta.

Las imágenes no son oficiales, pero eso no ha impedido que circulen como la pólvora y lleguen a todos los rincones del mundo. Grabadas por transeúntes y curiosos, las secuencias filmadas en pleno Manhattan muestran a Hathaway o Streep caminando entre taxis y escaparates, como si no hubiera pasado el tiempo. Con apenas segundos de metraje o fotos borrosas, los vídeos superan cientos de miles de visualizaciones en TikTok y X, antes Twitter. “¿Estoy soñando?”, se lee en el texto que acompaña uno de los virales en el que se cuela Nigel, el tan querido asistente de Miranda, interpretado por Stanley Tucci. “Anne en la grabación de El diablo viste de Prada 2???? es simplemente: perfecta”, agrega otro tuit con 10.000 mil vistas.

No es solo la nostalgia lo que impulsa este entusiasmo, es también el poder visual de la moda en pantalla. En la primera entrega, Patricia Field fue la encargada de diseñar un vestuario que marcaría una generación, lo mismo que hizo durante las seis temporadas de la serie Sexo en Nueva York. Esta vez, los focos están puestos en si se mantendrá ese tono estilístico hoy icónico. Aunque aún no se ha confirmado el equipo de vestuario, algunos medios como la revista Elle se han atrevido a dar el nombre y apellido de los diseñadores detrás de cada look filtrado. El más sonado es el de una estrecha colaboradora de Field: Molly Rogers. Ella ha sido la estilista a cargo de And Just Like That… —secuela de la mítica Sexo en Nueva York que acaba de anunciar su punto y final tras tres temporadas—, a la que Field no pudo sumarse porque tenía contrato con Emily in Paris, por lo que recomendó a su amiga.

Los tiktokers han tomado el relevo como detectives del glamour y pausan fotogramas de estos vídeos caseros para identificar joyas, bolsos o gafas y hacer comparaciones con los complementos de la primera película, que sale mejor parada en cuanto a críticas. Al menos por el momento.

Pero las grabaciones difundidas en redes sociales y medios de comunicación que analizan esos nuevos estilismos revelan también secretos del nuevo filme dirigido por David Franke. Los internautas ya comentan nuevas incorporaciones al reparto, entre ellos, han sido capturados en el set los actores Darren Criss y Chris Colfer, conocidos por su participación en la serie Glee. También se ha desvelado que se une al elenco la actriz Simone Ashley, quien saltó a la fama tras protagonizar la segunda temporada de Los Bridgerton. Y se ha visto por el rodaje al oscarizado Cillian Murphy, popular por su papel de Tommy Shelby en la serie Peaky Blinders.

Incluso Aline Brosh McKenna, la guionista de la película, ha calificado como un “honor” la gran expectación que el rodaje está levantando. “La gente se queda fuera para ver fugazmente a estos actores y estos personajes que aman, porque verlos caracterizados realmente emociona a la gente, especialmente porque es una película de moda”, dijo McKenna en declaraciones a IndieWire este 4 de agosto. “Sabíamos que habría mucho interés. Personalmente, no había experimentado este nivel de gente viniendo [al set], pero así es el mundo en el que vivimos”.

No todo es emoción desmedida. Una parte del público, incluidos algunos cinéfilos y profesionales del sector, ha manifestado su descontento con la avalancha de filtraciones. Para ellos, la exposición constante de imágenes del rodaje arruina la experiencia de descubrimiento que debería darse en la sala de cine. “Si siguen sacando info va a perder toda la gracia”, se queja un usuario en X, aludiendo a cómo se están propagando, ya no solo los looks, sino también posibles escenas clave o giros argumentales.

El regreso de El diablo viste de Prada se suma a una larga lista de reboots, secuelas y revivals: de la mencionada de Sexo en Nueva York a Clueless, pasando por Chicas Malas. Pero no todos estos clásicos noventeros y dosmileros generan el mismo fervor. ¿Por qué este sí? Quizá porque la película original supo capturar algo atemporal: el deseo de perseguir tus sueños, el precio del éxito y el vértigo de vivir al ritmo de una industria despiadada. “Tengo 28 años y trabajo estable, lo que todo el mundo espera de mí es que me case y tenga hijos, cuando lo único que espero yo es El Diablo viste de Prada 2”, dice otra fan en X.

A falta de tráiler, sin póster oficial y con un año por delante, la película ya ha empezado. No en cines, sino en unas pantallas más pequeñas que todos llevamos en el bolsillo.