Shia LaBeouf llega a un acuerdo judicial con su expareja FKA Twigs, quien le demandó por agresión sexual y maltrato
El proceso se resuelve cinco años después de que la cantante británica, que fue pareja del actor hasta 2019, le denunciara ante un juzgado de Los Ángeles. Desde entonces, el intérprete, que llegó a admitir sus comportamientos violentos, ha estado desaparecido de la vida pública


Desde hace un tiempo, apenas se ha sabido públicamente nada de quien hace algo más de una década fuera llamado a ser uno de los jóvenes prodigios del cine, el actor Shia LaBeouf (Los Ángeles, 39 años). Después de varias salidas de tono públicas y con las acusaciones de comportamientos violentos cercándole, el polémico actor desapareció prácticamente de la escena a principios del año 2021, pocos meses después de que su expareja, la cantante británica FKA Twigs, le denunciara ante un juzgado de Los Ángeles (California) por “agresión sexual, maltrato y angustia emocional” a principios de diciembre de 2020. Ahora, cinco años después, el juicio al intérprete por estas acusaciones, que según The Hollywood Reporter estaba previsto para el próximo mes de septiembre y que finalmente se ha adelantado, se ha resuelto con un acuerdo entre las partes y la retirada de la demanda millonaria. Aunque no se han revelado sus términos, un abogado de la artista, que solicitaba una indemnización de 10 millones de dólares por los daños sufridos, lo notificó al tribunal el pasado lunes 21 de julio.
La demanda interpuesta entonces por la cantante, cuyo nombre real es Tahliah Debrett Barnett y que mantuvo una relación con el actor desde 2018 hasta 2019, no era la primera acusación de violencia contra LaBeouf, quien ya entonces arrastraba un historial de comportamientos violentos: además de diversos arrestos con cargos finalmente desestimados como agresión y alteración del orden público, la estilita Karolyn Pho, que también fue su pareja, y la cantante Sia, con quien grabó un videoclip en 2015, habían hablado sobre sus episodios de violencia. El testimonio de Pho, recogido en la demanda de 2020, habla de que en una ocasión el actor, borracho, la inmovilizó contra una cama y le dio un cabezazo que le hizo sangrar.
Otra expareja de LaBeouf, la actriz Mia Goth, con quien rodó la película de Lars Von Trier Nymphomaniac (2013), sufrió en su momento la violencia por parte del intérprete. En 2015, unos desconocidos grabaron un vídeo en el que él mostraba un comportamiento abusivo con ella. Después de que los hombres le apartasen de Goth y lo metieran en un coche, el actor llegó a decirles: “Si me hubiera quedado allí, la habría matado”. Por su parte, la cantante Sia, que en 2015 había elegido a LaBeouf como protagonista de su vídeo Elastic Heart, apoyó a FKA Twigs en su demanda, expresándose así en sus redes sociales: “Yo también he sido herida emocionalmente por Shia, un mentiroso patológico que me engañó para mantener una relación adúltera diciendo que estaba soltero”. Además, aseguraba: “Creo que está muy enfermo y siento compasión por él y por sus víctimas”.

En enero de 2021, FKA Twigs contó en un podcast de la BBC que vivía “asustada, intimidada y controlada” y que cuando se decidió a dejar al actor, tras meses de violencia y control, sufrió síndrome postraumático. La cantante británica explicó entonces que el actor era cada vez más “celoso y controlador”, que no le gustaba que mirara a otros hombres y que la despertaba en mitad de la noche para reafirmar su amor. FKA Twigs sostenía en su demanda que LaBeouf le contagió una enfermedad de transmisión sexual a sabiendas de que la tenía e incluía una larga lista de supuestas agresiones y presuntos comportamientos machistas. Por ejemplo, FKA Twigs aseguraba que en 2019 el actor conducía a toda velocidad y sin cinturón cuando la amenazó con estrellarse con el coche si no le decía en ese mismo momento que le amaba. Justo después, cuando pararon en una gasolinera, LaBeouf, siempre según el relato de la denuncia, la agredió y la tiró contra el coche antes de obligarla a meterse de nuevo en el vehículo para continuar el viaje.
El mismo mes en el que fue denunciado, LaBeouf y Margaret Qualley, actriz e hija de Andie MacDowell, que en aquella época mantenían una relación, se separaron. “Simplemente se encuentran en diferentes etapas de sus vidas “, dijo una fuente anónima a la revista People.

Así fue como Shia LaBeouf acabó aislándose y desapareciendo. En febrero de 2021 se retiraba de la vida pública e ingresaba en un centro médico. Lo aseguró la revista Variety, confirmando además que el actor y la agencia de talentos de Hollywood CAA que le representaba habían puesto fin a su colaboración por una decisión personal del protagonista de Transformers, que había querido poner en pausa su carrera profesional para recibir ayuda.
Antes, LaBeouf había admitido sus problemas de agresividad y de alcoholismo en varias ocasiones, siendo la última el mes de la denuncia de FKA Twigs, a través de un correo electrónico dirigido a The New York Times en el que afirmaba: “No estoy curado del alcoholismo ni de mi trastorno por estrés postraumático. Pero estoy dispuesto a hacer lo que sea para recuperarme, y siempre pediré perdón a quienes he herido por el camino”.
Con su ingreso, parecía acabar una década en la que el intérprete había estado inmerso en una espiral de autodestrucción. En 2011, con 25 años, el hijo de una madre artista visual y un padre mimo y payaso de circo que también fue adicto acumulaba cinco arrestos policiales: por amenazar a su vecino con un cuchillo, por negarse a abandonar una farmacia donde no querían atenderlo, por fumar en una zona restringida, por negarse a someterse a un control de alcoholemia tras un accidente de tráfico y por liarse a puñetazos con un hombre a la salida de un bar. Todo eso, sumado a su paso por clínicas de desintoxicación, a diferentes broncas públicas y a sus excentricidades.
En mayo de este 2025, en una de sus escasas apariciones, el actor visitó el Festival de Cine de Cannes para estrenar el documental Slauson Rec, que explora la controvertida escuela de interpretación que LaBeouf fundó en el Slauson Recreation Center de Los Ángeles poco antes de la pandemia. A pesar de que la cinta muestra sus intensos y a menudo conflictivos métodos de enseñanza, incluidos casos de agresión física a los alumnos, y vuelve a mostrar su tendencia a la toxicidad, el actor ha expresado su total apoyo al proyecto, además ha participado en él admitiendo haber hecho “mierdas horribles en el pasado”.
Habrá quien recuerde aquel momento en el que, en febrero de 2014, el que una vez fue el niño bonito de Hollywood apareció en el estreno de Nymphomaniac en Berlín con una bolsa de papel sobre la cabeza donde se leía “Ya no soy famoso”. Al final, LaBeouf casi pudo cumplir su propia profecía.
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