Menú semanal de El Comidista (20 a 26 de noviembre)

La crema de calabaza asada no sabe completamente distinta a la convencional, pero su gusto es un poco más intenso, caramelizado y tostado.

Los mejillones son un manjar y no hay una salsa más vasca y más fácil que la verde. Lo juntamos todo y te regalamos un platazo de aúpa.

Además del blandito –el de toda la vida– encontramos también el saroni y el persimon, con una textura más parecida a la de la manzana.

El miso potencia el sabor de todo lo que toca. En esta receta usamos el blanco, más amable y dulzón, pero si buscas más brío, puedes tirar del rojo.

El cuscús se hace casi sin querer. Pues estos pimientos rellenos de cuscús, se hacen solamente queriendo un poco.

El sirope de arce se encuentra en supermercados y en tiendas de dietética. Pero si no das con él, puedes sustituirlo por caramelo líquido.

Enciende el horno y date el gusto de preparar unas setas rellenas sin rebozado ni fritanga, pero igualmente sabrosas y bien otoñales.

Al plato, en un buen panecillo con queso o para una barbacoa con amigos: ni el más carnaca podrá resistirse a esta hamburguesa vegetal.

Las naranjas son más ácidas al principio de la cosecha, pero van subiendo de dulzor a medida que avanza el frío: es muy recomendable aprovechar la temporada.

Las ensaladas de otoño son la bomba. Prueba esta con rúcula, caqui persimon y burrata y descubre lo bien que combinan estos tres ingredientes.

La combinación de estos moluscos con la legumbre y el níscalo, sólamente aderezados con vinagre, aceite de oliva y perejil, es sensacional.

Junto al frío y las lluvias también llegan las ganas de encender el horno, así que ¡a por un dulce reconfortante para desayunar o merendar!

Lo importante en este plato es que la sobrasada sea buena, porque el sebo con pimentón de ese que venden por ahí arruinará el invento.

Descubre, con ayuda del horno, que la coliflor no es la verdura blandurria que te servía tu madre de pequeño.

Esta fruta es rica en pectinas, aminoácidos, fibra y elementos como calcio, hierro o potasio, así que aprovecha las que trae la nueva temporada.

Un guiso mediterráneo y otoñal cuya clave reside en escoger el mejor pollo que puedas permitirte: prepara pan, que te hará falta.

Las frutas refrescan el conjunto y logran que nos sintamos menos culpables por nuestras arterias.

Un arroz con una de las carnes más asequibles del mercado, aderezada con unas hierbecillas que marcarán la diferencia: el tomillo y el romero.

Lo que distingue a este pastel es el tratamiento de la naranja, que se incorpora a la masa después de haber sido cocida y triturada.

Siempre has deseado probar la bebida que trasiegan Harry Potter y sus amigos. Ahora tienes la oportunidad, y además toña un poquito.