Una nueva fase de obras en Atocha deja a los viajeros despistados de Cercanías varados en Embajadores y Villaverde Alto

Este miércoles 2 de julio comenzó una nueva fase de obras en la estación de Atocha Cercanías, cuyo objetivo será aumentar la capacidad del túnel de Sol en un 33% y mejorar la “fiabilidad” en un 50% y los tiempos de viaje, según ha informado Renfe. La reforma, que ocurrirá durante todo el verano hasta el 30 de agosto, ha tomado desprevenidos a cientos de viajeros de las líneas C3, C4 y C5, las principales afectadas, que se aglomeran en los andenes de las líneas alternativas o en las paradas de autobuses en búsqueda de una solución al trayecto interrumpido. A ello se ha sumado una incidencia en un tren en la estación de Aluche, que ha atascado el tránsito de viajeros aún más.

La línea C5 es la mayor afectada por las obras de Atocha, hasta el momento, ya que hasta el 30 de julio el servicio entre las estaciones de Embajadores y Villaverde Alto estará completamente suprimido. Los viajeros que llegan a las estaciones límites del corte se bajan buscando opciones para continuar su camino, como los de Embajadores, que según su destino pueden subirse a los autobuses de la EMT de las líneas 22, 60, 76, 78, 81, 116, 130 y 131, que no tendrán coste extra si se dispone de una tarjeta de Renfe&tú, además de la línea 3 de Metro que llega hasta El Casar.

A finales de junio, Renfe anunció a través de sus redes sociales el inicio de las obras, que se realizarán durante el verano por “sentido común”, ya que este es un periodo de menor demanda y así se logrará “minimizar el impacto sobre los usuarios”. La empresa aseguró que trabajadores del área de Atención al Cliente en las estaciones informarían a los usuarios de las alternativas de Metro y de autobuses de la EMT disponibles para sortear los atascos en las líneas de Cercanías afectadas.

Al corte de la línea C5 entre Embajadores y Villaverde alto se ha sumado en la mañana de este jueves la avería en un tren en la estación de Aluche, por lo que los usuarios entre Embajadores y Móstoles, que técnicamente no estarían afectados por las obras, también han sufrido los retrasos. Según un portavoz de Renfe, el tren averiado ha estado detenido en Aluche cerca de media hora, lo que ha afectado a ocho trenes con demoras medias de 20 minutos, y agrega que la incidencia se ha resuelto sobre las 08.20.

Pilar, una usuaria de la C5, ya que vive en Madrid y trabaja en Móstoles, asegura que esta mañana ha demorado una hora y media en llegar, el doble que lo normal. “He llegado sobre las 08.15 a Embajadores y todo el andén estaba repleto. Esperé y esperé hasta que me di cuenta de que no pasaría el tren y fui a coger el metro sur, pero había tanta gente que los trabajadores estaban dosificando los que se subían al vagón”, explica Pilar, que prefiere no revelar su apellido. Aclara que no sabía de la incidencia porque Renfe no lo comunicó por sus redes sociales, como normalmente hace. “Nadie me dijo en la estación que había retrasos y ahí estuve esperando. Si lo hubiera sabido antes hubiera cogido el coche”.

La siguiente fase de las obras, del 19 de julio al 30 de agosto, afectará a las líneas C3 y C4 debido al corte del túnel de Sol. En ese periodo, el tráfico entre las estaciones de Chamartín y Atocha estará interrumpido y la estación de Cercanías de Sol cerrará. Las alternativas en este caso son las líneas C2, C7, C8 y C10, que son las que pasan por el túnel de Recoletos y también conectan a Chamartín y Atocha.

El Ayuntamiento de Madrid y el Consorcio Regional de Transportes (CRTM) tenían planificado comenzar estas obras el pasado enero, pero se han retrasado hasta el verano, no solo por la disminución de viajeros en esta época, sino también por el inicio de las reformas para el soterramiento de la A-5, que requirió el refuerzo de la línea C5 de Cercanías. El soterramiento provocó que los usuarios tuvieran que modificar sus itinerarios habituales, sobre todo los usuarios del coche, por lo que también se reforzaron varias líneas de autobuses para priorizar el uso del transporte público en esta área. Pilar asegura que Móstoles y Alcorcón se han convertido en “ratoneras” desde entonces, y que si a ello le sumas las obras en las líneas C3, C4 y C5, que son las que van hasta los municipios del sur, y las posibles incidencias en los tramos sin obras, el caos está asegurado.

Las nuevas obras de Atocha suponen una inversión de 54 millones de euros por parte de Adif, y forman parte de un conjunto de reformas más amplio que debe terminar en 2026. En esta fase del verano “incrementará la capacidad de las líneas cuyos trenes pasan por el túnel de Sol, que contará con una vía más”, según informa Renfe, lo cual beneficiará principalmente a los viajeros de la C3 y la C4. Además, se ampliará un andén que se destinará a la subida y bajada de los viajeros de la C5.