Los ‘Ocho de Parla’, héroes adolescentes al rescate de una mujer en la costa de Irlanda: “La gente no hacía nada, solo nos grababa”
El periódico local ‘The Journal’ dio cuenta de la noticia protagonizada por alumnos de un instituto público en un viaje de intercambio. Una de las afectadas fue ingresada en un hospital de Dublín


Los jóvenes no se implican, los jóvenes no saben lo que quieren, a los jóvenes les da igual lo que pasa a su alrededor. Si el mundo estuviera construido a base de tuits o frases hechas, todo esto podría tener algún sentido. Pero si quien la pronuncia es un grupo de ocho adolescentes que acaban de salvar la vida a una mujer, las frases tienen algo de protesta. Si además son de Parla, un municipio al sur de la capital, es casi una reivindicación generacional y toponímica.
Ainhoa, Sofia, Ángela, Gabriela, Álvaro, Samara, Alejandro y Aleksandar estaban a punto de terminar la semana de intercambio cuando vieron a una mujer inmóvil en el agua. Sucedió hace dos semanas, cuando un grupo de alumnos del Instituto público Humanejos de Parla, con edades entre los 15 y 16 años, pasaba una semana en Irlanda junto a sus profesores como parte de un programa de inmersión con familias locales para aprender inglés. Ser bilingüe en un lugar así no es fácil.
Gobernada por el partido socialista desde hace 46 años, salvo un breve periodo de gobierno del PP, entre 2015 y 2019, Parla tiene unos 135.000 habitantes y una de las rentas medias más bajas de la Comunidad de Madrid, unos 24.000 euros frente a los 38.000 de media regional o los 65.000 de Pozuelo. Tiene también la tasa de paro más alta de la región, casi un 10%, dos puntos más que en la capital y en sus calles convive un 23% de población inmigrante, principalmente marroquí.
Era su última tarde en Irlanda, así que se juntaron en el paseo marítimo de Bray, a media hora de Dublín, para conocer la costa. Fue entonces cuando vieron a una mujer en el agua que llevaba mucho tiempo boca abajo. “Pensamos que estaba buceando, pero estaba vestida. Así que esperamos unos minutos más. Nos sorprendía que la gente no hacía nada, como si fuera algo normal, pero seguía sin moverse, así que decidimos meternos al mar y entrar a por ella”, recuerdan Ainhoa Gil y Ángela Gomes, de 15 años. Detrás de ellas, el resto de chicos las siguió sin pensárselo. Pero pesaba mucho. Dos de ellos la cogieron por los brazos y otras de las piernas, pero el mar batía con fuerza y la mujer era un bulto inerte que echaba espuma por la boca. “Intentábamos arrastrarla, pero era una mujer grande y el agua estaba tan fría que te rompía los pulmones”, resume gráficamente Samara Rodríguez. En este momento, según el reporte meteorológico, el agua estaba a 11 grados, dos menos de los que suele haber en las aguas de Galicia en enero.
Finalmente, entre caídas y golpes con las rocas, los estudiantes lograron llevarla hasta la orilla y una vez en la arena comenzaron a reanimarla con ayuda de los primeros espontáneos. Boca a boca, presión en la boca del estómago, boca a boca y vuelta a empezar. Al tercer intento la mujer abrió los ojos. Su amiga se recuperaba mientras tanto del susto.
Mientras esto pasaba, decenas de personas seguían la escena con el móvil en la mano. “Es lo que más me indignó, que la gente nos grababa, pero no hacía nada”, añade Ainhoa, que desde aquel día camina con muletas debido a un golpe en la rodilla durante el rescate. “Así es hoy en día”, dice Sofia Szmuc, “la gente no ayuda y quieren que el trabajo duro lo haga otro, pero luego tienen tiempo para subir los videos a las redes”, resume. Después de aquello llegaron las ambulancias y en su precario inglés explicaron lo que había sucedido.

Una de las últimas veces que Parla apareció en este periódico fue a principios de mayo por boca de Paloma López, la secretaria de CCOO-Madrid, quien denunció en una entrevista el aumento de la desigualdad entre el norte y el sur de la Comunidad de Madrid. Una diferencia de renta tan salvaje que afecta incluso a la esperanza de vida. “La esperanza de vida en Parla es de dos años menos que en Pozuelo”, decía el titular.
A nivel educativo, en los últimos años Parla ha logrado reducir el abandono escolar de forma notable, sin embargo, la principal amenaza para muchos jóvenes es la aparición de bandas cada vez más grandes y violentas. Aunque en los últimos meses ha habido una mejora, en 2024 Parla se convirtió en una de las ciudades con una mayor tasa de criminalidad, al aumentar un 23,6%, el mayor incremento en la Comunidad de Madrid, donde la media fue del 0,3%. Los delitos que más crecieron incluyen robos con violencia, agresiones sexuales, robos con fuerza en establecimientos y domicilios, sustracción de vehículos y riñas tumultuarias. De hecho, los sindicatos policiales como JUPOL y SUP insisten en sumar más efectivos a los 250 policías, cien de ellos dedicados a tareas administrativas, para reforzar la seguridad en una de las ciudades más problemáticas del sur.
Sin embargo, en la prensa extranjera el nombre de Parla ha salido ahora por otro motivo. Al día siguiente del rescate, el periódico local The Journal, recogió la noticia de la siguiente forma: “Una mujer fue trasladada al hospital después de que ella y otra mujer tuvieran problemas mientras nadaban en el paseo marítimo de Bray en Co Wicklow ayer por la noche. La alarma se dio poco después de que la pareja, ambos de unos 30 años, tuviera problemas en el agua cerca de la popular ciudad costera. Se sabe que un estudiante español rescató a ambas mujeres del agua, lesionándose en el proceso. Ambas mujeres fueron rescatadas del agua antes del anochecer. Al lugar acudieron ambulancias y miembros de la Guardia Costera de Greystones/Wicklow, incluidas unidades terrestres y marítimas. La mujer fue trasladada al Hospital Universitario St. Vincent de Dublín para recibir tratamiento”, recoge el texto.
“Estos chicos han dado una lección y un ejemplo. Dicen que los adolescentes no se implican y estos chicos no dudaron en lanzarse el agua para salvar a una persona en un país que no es el suyo”, dice en su despacho el Director del IES Humanejos, Iván Morales.
Una de las canciones más escuchadas y cantadas en las calles por los jóvenes es Parla City, un tema del productor musical Feez en su disco 28982 que reivindica, como Lamine Yamal, el código postal de Parla y que incluye estrofas como esta: “Parla City a mí me ha criado cuantas veces que me han querido llevar detenido y he sobrevivido a las pocas que me han cogido, pero es que el estilo y no es que sea yo el elegido…."
-¿Creéis que Parla tiene mala fama?
-Siiii, —responden los adolescentes al unísono—.
-Parece que todo lo que aquí pasa es malo o que por el hecho de vivir aquí estamos en una banda, —añade Alejandro—.
El Instituto ha agradecido a los chicos su valiente acción con un pequeño regalo y la concejalía de cultura del Ayuntamiento de Parla celebrará un acto de homenaje a los estudiantes la semana que viene. Ahora la última noticia que saldrá de Parla no tendrá que ver con bandas ni abandono escolar.
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