Los activistas climáticos abandonan el campus de la UB después de una semana acampados

Siete días después de la ocupación del claustro del edificio histórico de la Universidad de Barcelona (UB) por una treintena de estudiantes del movimiento ‘EndFossil’ con carácter indefinido hasta que el centro se comprometiera con el fin de los combustibles fósiles, las dos partes han llegado a un acuerdo. Los activistas reclamaban una asignatura de educación ecosocial transversal y cortar los vínculos de la UB con el banco Santander y Repsol, empresas que, consideran, “se benefician de la crisis climática”. Dos portavoces han anunciado el acuerdo en el Parlamento catalán después de haber trasladado sus demandas a varios diputados autonómicos.

El rector de la UB, Joan Guàrdia, ha firmado un comunicado donde se compromete a desarrollar una asignatura de crisis ecosocial en todos los planes docentes del centro, con enfoque interdisciplinar, cuya implantación será supervisada por una comisión de asesores. Sin embargo, los representantes del movimiento creen que se ha quedado “muy lejos de cumplir” su segunda petición: terminar con la cátedra Repsol de Transición Energética, que los estudiantes califican como “un lavado de cara” de la empresa que, señalan, produce “más gases de efecto invernadero” en España.

Los portavoces del movimiento climático ha manifestado después de su reunión con varios representantes políticos que desean utilizar las vías institucionales para cumplir sus exigencias restantes. Por ello, han solicitado reunirse con el Consejero de Universidades, Joaquim Nadal, para revisar la normativa que regula las cátedras en los centros universitarios, así como una comisión que revise el sistema de financiación universitaria.

Los estudiantes también han celebrado en el acto que más de 200 profesores e investigadores universitarios, principalmente catalanes, han firmado una carta suscribiendo sus reivindicaciones. Figuran académicos como la catedrática de la UB Susana Narotzky, el profesor de la Universidad Autónoma de Madrid Jorge Riechmann o el investigador del CSIC Antonio Turiel.

A pesar de no haber conseguido la totalidad de sus exigencias, los miembros de EndFossil valoran este primer acuerdo como “un paso en la dirección correcta”. Han concluido: “Volveremos a ocupar y presionar para que las universidades estén a la altura. No solucionaremos esta crisis climática con empresas y bancos que se aprovechan de ella”.

Esta ocupación realizada por miembros veteranos de organizaciones ecologistas como Fridays for Future o Extinction Rebellion ha sido la primera acción del movimiento climático internacional ‘End Fossil’ en Barcelona. Esta entidad creada en mayo ocupa campus universitarios de forma pacífica para mostrar su rechazo a la utilización de combustibles fósiles.

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