Los mensajes lanzados por la ventana de un secuestrado en Madrid: “Es una persona violenta y tiene armas”

“Necesito ayuda urgente. Estoy encerrado”. “Rápido, por favor, es una persona violenta y tiene armas en casa”. Una serie de mensajes, escritos y en mayúsculas y lanzados desde la ventana en la que se encontraba un hombre secuestrado, permitieron que el pasado 8 de septiembre un hombre fuera detenido por retener y torturar a otro en un piso en el distrito madrileño de Puente de Vallecas. El arrestado ha ingresado en prisión preventiva, según fuentes policiales.

Un vecino del inmueble, situado en la calle Enrique Velasco 24, recibió varias de estas peticiones de auxilio, escritas en servilletas y avisó al 091. Tanto la persona secuestrada como el arrestado eran amigos. La víctima recibía dinero mensualmente por ser administrador de una empresa en Portugal. A pesar de haber viajado al país vecino y recibir una cantidad de dinero, se había gastado todo lo que tenía y se encontró en la calle, relatan fuentes policiales. Como no tenía casa, el arrestado, que también había sido administrador de empresas a cambio de dinero, le ofreció irse a la suya.

Llegó un momento en el que el secuestrador empezó a reclamar el dinero que su amigo recibía mensualmente, sin conseguirlo. “Ese es el motivo por el que lo encierra en casa, le golpea y lo amenaza”, relatan esas fuentes.

No ha trascendido el tiempo que la víctima estuvo en esa situación, pero sí su relato desesperado a través de las servilletas. “Necesito ayuda urgente. Estoy encerrado. No puedo salir. Ayuda. Policía. 112. Estoy secuestrado. Me han pegado”, escribía en una de las notas, adelantadas por Abc este viernes y a las que ha tenido acceso este periódico. En esa misma petición, pedía discreción, daba la dirección de la casa y el teléfono de sus padres para que contactara con ellos. “Necesito que tire la puerta la policía para salir. Rápido, por favor. Es una persona violenta y tiene armas en casa”, reclamaba en otro papel.

Los agentes que fueron a la casa consiguieron hablar con él a través de la ventana desde la que estaba arrojando las servilletas en las que pedía que le liberaran. Los bomberos lograron sacarle y le llevaron al hospital, donde comprobaron que tenía hematomas. Cuando el principal responsable del secuestro regresó a su vivienda, fue detenido. Está investigado por detención ilegal, lesiones, torturas y tenencia de armas prohibidas.