Ayuso renuncia al choque con Feijóo por el sistema de primarias en el PP

Isabel Díaz Ayuso renuncia a dar la batalla por las primarias del PP. La presidenta de la Comunidad de Madrid ha cambiado el paso y ha decidido no enmendar la ponencia de estatutos que el PP aprobará en el próximo congreso y que cambia el sistema de elección del líder del partido, suprimiendo el voto directo de las bases y volviendo a un modelo de compromisarios.

Fuentes del PP de Madrid han confirmado a EL PAÍS que desisten de enmendar la ponencia, si bien advierten de que siguen encontrando flecos sueltos en el nuevo modelo y que presionarán para que se modifiquen. “Hay matices que deben ser concretados en el Reglamento Marco de Congresos y que se abordaran posteriormente y para los que el PP de Madrid trabajará junto a la nueva dirección del Partido”, afirman estas fuentes.

El paso atrás de Ayuso es relevante porque evita el choque de la líder madrileña con Alberto Núñez Feijóo en el congreso del PP del próximo mes de julio. El líder del PP ha conseguido imponer su modelo, de regreso a los compromisarios, frente a las primarias puras que prefería Ayuso. El PP de Madrid se da por satisfecho al haber logrado, al menos, y tras intensas negociaciones bajo los focos, que el sistema incluya una corrección para reducir la influencia del aparato del partido en el resultado.

Así, el nuevo sistema de elección del líder del PP elimina la doble vuelta vigente ―en la primera, los militantes votan a los candidatos; y en la segunda, votan los compromisarios― para regresar a un modelo indirecto, en el que las bases solo votan a los delegados al congreso, que son quienes después escogen al líder. Tras la presión del PP de Ayuso, los compromisarios serán elegidos por los afiliados en listas cerradas de cada candidato. De esta forma, llegarán al congreso con un mandato previo, lo que dificultará al aparato del partido controlar el resultado.

El PP de Madrid considera que el nuevo sistema “mantiene el protagonismo de los afiliados”, porque “aúna en una votación la elección del candidato a Presidente y los compromisarios, vinculando a éstos directamente con el candidato por el que son elegidos”. Los populares madrileños subrayan que han defendido la máxima de “un afiliado, un voto”, que “se trata de un principio que busca que el voto del afiliado cuente, que el afiliado sea la base del proceso congresual”. “De esta manera”, concluyen fuentes de los populares madrileños sobre el nuevo sistema, “la voz del afiliado se respeta, puesto que el compromisario se debe a lo votado por el afiliado, ya que en su voto va intrínseco el respaldo a un candidato a Presidente”.

Ayuso temía que el cambio en las primarias limitara sus posibilidades en el futuro para optar al liderazgo del partido. En el entorno de la presidenta madrileña había escamado el intento de cambiar el sistema justo ahora, cuando no urge porque en el próximo congreso de julio Feijóo será elegido con el modelo anterior. Pero también levantaba suspicacias que el barón andaluz hubiera respaldado ese cambio. A nadie escapa en el PP que Juan Manuel Moreno Bonilla es el otro presidente autonómico del PP mejor situado para suceder al político gallego. La líder madrileña sospechaba que quisieran hacerle la cama, y por eso ha tratado de que los militantes tuvieran la última palabra.

El problema con el que se ha topado Ayuso es el contexto político. La crisis del PSOE tras el estallido del caso Cerdán ha influido de forma determinante en que se haya visto forzada a evitar el choque. El escenario de un enfrentamiento perdió mucha fuerza en cuanto empezaron los problemas para Pedro Sánchez. La semana pasada, los ayusistas admitían en privado que no es el momento de tensiones internas, ya que no se entenderían cuando el adversario está en un momento de debilidad. De ahí que su estrategia haya virado a presionar en privado para lograr mejoras transigiendo con el modelo que quería Feijóo.

Desde Nueva York, donde se encuentra de viaje oficial, Ayuso ha reconocido hoy de forma velada que este no es el momento de ir al choque. En el congreso del PP, ha reflexionado, se reelegirá a Feijóo y a la nueva ejecutiva que quiera proponer, y ese debe ser el foco. “Somos conscientes en que tenemos que centrarnos en ser una alternativa”, ha razonado la presidenta madrileña. “Ahora estamos trabajando con un sistema conjunto para que los afiliados tengan la máxima participación y tengan toda las garantías”, ha explicado, antes de concluir que “el debate de enmiendas se tendrá la semana que viene”. Ayuso se retira de la batalla de las primarias, pero todavía tiene margen para marcar perfil propio en el PP. Por un lado, con el posible debate de enmiendas a la ponencia política, la que recoge el ideario del partido. Pero además, con la oportunidad que le brinda ser la anfitriona, ya que el cónclave se celebra en Madrid. La líder madrileña pronunciará un discurso que se mirará con lupa y que será inevitable que se compare con el de Feijóo.