Prodigioso aroma

Elaborar vino de alta calidad con la uva pinot noir es todo un alarde de fe en las posibilidades de un varietal que no resulta nada fácil fuera de su Borgoña de origen. Tal vez por eso, el Grupo Codorníu Raventós ha recurrido a los viñedos de la comunidad monacal de Poblet para su Les Masies de Poblet, un encomiable intento de acercarse al esplendor francés. Más logrado es su La Font Voltada, de la variedad autóctona trepat.

Sin embargo, resulta más lograda y atractiva su propuesta basada en la garnacha, una uva prácticamente desaparecida en la denominación de origen Conca de Barberà. Doble mérito, porque el vino, elaborado a partir de viñas ubicadas a más de 700 metros en las montañas de Prades, linde con el Priorat, es un acierto en toda regla, obra del enólogo Ricard Rofes, capaz de conseguir un vino moderno con procesos centenarios, como fermentar con los racimos enteros y largas maduraciones con el raspón. Logra así un vino de prodigioso y limpio aroma varietal, pletórico de frutillos rojos silvestres, ligeramente compotados, que se acompañan por la incisiva voz de las notas florales, el bajo sostenido rumor de las hierbas de monte, con el terruño al fondo. Melodía que fluye, jugosa, para tapizar el paladar de un largo y fresco gusto afrutado.