La fuerza de la empatía

Algunas tragedias son capaces de provocar lo mejor o lo peor en las personas. La generosidad y la solidaridad pueden convivir con el desprecio o la indiferencia. ¿Qué despierta unas y no otras? En el caso de Julen, creo que la empatía ha sido fundamental. Podría haber sido el hijo, el nieto o el sobrino de cualquiera. Todos hemos imaginado en algún momento el dolor y la desesperación de sus padres. La empatía ha movido a quienes estuvieron en el rescate a darse las manos. Manos que han excavado incansablemente, manos que han sujetado en la frustración, manos que han rescatado el cuerpo sin vida del niño, manos que ahora secan las lágrimas de tristeza. ¡Qué poderosa es la capacidad de ponernos en la piel del otro! La empatía tiene una fuerza que nos impulsa a la acción. Que su expresión social no necesite de tragedias como esta para manifestarse con más frecuencia.

Emanuela Cardoso Onofre de Alencar. Rivas Vaciamadrid