Ariana Grande cancela sus conciertos de Monterrey

Confundidos y desinformados. Así estuvieron durante parte de la noche de ayer y la mañana de hoy los seguidores mexicanos de Ariana Grande. Los rumores acerca de la cancelación de sus conciertos previstos para este martes y miércoles en Monterrey comenzaron a inundar las redes sociales. “Que alguien nos confirme algo”, “Los que no estamos en el Estado [se refiere a que no viven en Nuevo León], queremos saber si se canceló o no”, escribían los seguidores en el perfil de Facebook de Zignia Live, empresa encargada del show. Sin embargo, no fue hasta primeras horas de la mañana mexicana que la página web de la compañía ponía un cartel de cancelado en la imagen promocional de la cantante, de 24 años.

Más tarde ha llegado el comunicado oficial. “Zignia Live y Ariana Grande lamentan informar de que los conciertos programados para el 18 y 19 de julio en la Arena Monterrey han sido cancelados; lo anterior por circunstancias imprevistas de la cantante”, reza el escueto comunicado de prensa. En el que, además de lamentar los imprevistos, explican el procedimiento para el reembolso del dinero, lo que deja claro que el espectáculo no está previsto que se reprograme.

Mucho se ha especulado al respecto. Periódicos mexicanos aseguran que los organizadores sabían desde el lunes que el concierto no se realizaría, pues los encargados de montar el show, parte de la gira Dangerous Woman de la artista, dieron la orden de desalojar el Arena Monterrey. Además, aseguran que el equipo de seguridad de la cantante estuvo el viernes realizando todos los pormenores para la llegada de Grande, pero que el día lunes se marcharon de la ciudad.

La noticia tomó por sorpresa a los casi 24.000 seguidores que habían comprado entradas para poder a su ídolo.

Ciudadana de honor

El pasado 12 de julio el Ayuntamiento de Manchester, Reino Unidos, por unanimidad de sus concejales, nombró ciudadana de honor a la cantante en reconocimiento a su actuación tras el atentado terrorista del pasado 22 de mayo.

Un terrorista suicida, Salman Abedi, detonó una bomba de fabricación casera en una salida del estadio Manchester Arena, justo después de que finalizara un concierto de la estrella del pop, lo que provocó la muerte de 22 personas, de las cuales siete eran menores.

El presidente de la corporación municipal, Richard Leese, presentó esta moción y describió a la cantante de 23 años como una "joven mujer americana para quien habría sido comprensible no querer volver a ver nunca más este lugar". En cambio, añadió, "trajo consuelo a miles de personas y ayudó a recaudar millones para el fondo de emergencia 'We Love Manchester'", al volver a la ciudad para actuar en el concierto benéfico que tuvo lugar en junio, junto con Coldplay, Justin Bieber y Katy Perry.