Eléctricas, telecos y otros sectores de suministros básicos anticipan subidas de tarifas para 2026

Menos de un mes antes de la siempre temida cuesta de enero, los sectores que operan algunos de los servicios básicos a la ciudadanía ya están anticipando que habrá nuevos incrementos en los suministros básicos que pagan los consumidores a partir de 2026. De hecho, tanto empresas como reguladores o administraciones han venido advirtiendo en las últimas semanas y meses de que desde el próximo 1 de enero habrá actualizaciones de tarifas en servicios como internet, teléfono, luz, agua, tasa de basuras, televisión de pago o billetes de avión.

En la última semana, las tres grandes operadoras de telecomunicacaciones, Orange, Telefónica y Vodafone, han advertido que sus distintos paquees de telefonía, internet y televisión subirán alrededor de un 4%, cifra por encima de la inflación. Las compañías justifican dichas subidas principalmente por incremento de costes operativo, sobre todo en lo que tiene que ver con el encarecimiento de los servicios que les dan las plataformas audiovisuales y el gasto en derechos de retransmisión como el fútbol.

También las principales compañías eléctricas han dejado entrever subidas de precios en la tarifa de la luz. Tanto Iberdrola como Endesa advirtieron que sus comercializadoras estaban asumiendo este año un impacto vinculado al apagón de unos 360 millones de euros. Otras empresas acusan subidas en torno al 7% por esta causa. La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) prohibió actualizar el pasado ejercicio las tarifas por la operación reforzada que aplica Red Eléctrica desde el histórico incidente y, por lo tanto, las empresas esperan haber podido trasladar este coste a sus tarifas al 100% ya en 2026, con la renovación de sus contratos. Una práctica común entre comercializadoras de luz, que admiten el impacto y que no les queda más remedio que incrementar sus tarifas.

Esta subida atañe al coste energético que se paga en la factura, pero hay otra parte importante, que son los costes regulados, que también subirán. La CNMC está tramitando unos peajes eléctricos para 2026 que serán un 4% más caros, según la propuesta que ha sacado a consulta pública el regulador en los últimos días. La nueva tasa de retribución de las redes que empezará a aplicarse el próximo año tendrá un coste añadido para el bolsillo de los usuarios.

Otro servicio básico por el que pagarán más los hogares de muchos municipios en España será el agua. Aigües de Barcelona, la sociedad publico-privada dominada por Agbar (Veolia) que gestiona el agua del Área Metropolitana de Barcelona, ya anunció una subida del 2,9% del recibo para 2026, pero además municipios de su alrededor ya han advertido de subidas de hasta un 5,8%.

El pasado mes de febrero, el Canal de Isabel II, la compañía propiedad de la Comunidad de Madrid que gestiona el ciclo integral del agua en la comunidad de Madrid, anunció un incremento de la factura del 3% anual hasta 2030. El objetivo es mejorar la red de infraestructuras hídricas. El sector asegura que durante décadas no se han incrementado las cuotas de agua -competencia municipal- y ahora se deben subir para acometer las inversiones necesarias en un escenario donde la escasez es un problema creciente. Otro consorcio, el de Aguas Bilbao Bizkaia, también ha anunciado subidas del 4% de cara al próximo año.

Tasa de basuras

Otro coste que aumentará en muchos municipios en 2026 será la tasa de basuras, un gravamen que está generando polémica en algunos municipios. La Ley 7/2022 de residuos y suelos contaminados obliga a todos los municipios de más de 5.000 habitantes a instaurar una tasa de recogida de basuras, de modo que cada hogar pague por los residuos que genera. Y esto ya está forzando a los consistorios a trasladar la tarifa.

Este es el caso de Madrid, donde, con los cambios a implementar, se espera que la tasa de basuras suba entre 141 euros y 142,6 euros de media por hogar. Otros como Santa Cruz de Tenerife prevé incrementar esta tasa hasta un 50%. Sin embargo, no todos los hogares notarán esta subida, ya que hay ayuntamientos que se han adelantado y ya han actualizado el tributo por los cambios regulatorios.

Otro sector en el que se esperan incrementos de costes para los usuarios es el de las aerolíneas. Recientemente, la CNMC ha aprobado la propuesta de Aena de subir el canon que pagan las compañías aéreas por el uso de las infraestructuras aeroportuarias un 6,44% a partir del 1 de enero, en menos de un mes. Las operadoras de vuelos rechazaron dicha subida, aunque no han sido explícitas en si subirán sus billetes, ya que se trata de un sector altamente competitivo. Sin embargo, fuentes del sector aseguran que tarde o temprano acabarán repercutiendo, al menos en parte, el mayor coste que les aplicará Aena a sus usuarios.

Con los anuncios ya conocidos, aún falta un mes para conocer cómo se van a actualizar otros servicios y productos para los consumidores. Por ejemplo, el Gobierno aún tendrá que actualizar los peajes de las autopistas, que cada año suben conforme a una fórmula vinculada a la inflación. Pero entre las grandes incógnitas aún está saber qué va a pasar con las ayudas al transporte público que venían aplicándose desde la crisis derivada de la guerra de Ucrania, que provocó un shock en los mercados energéticos y muchos de los cuales llegan a su fin el próximo 31 de diciembre. Por el momento, algunos descuentos, que provienen tanto de la administración central como de la autonómica y local, ya han ido aminorándose.

En menos de un mes arranca una nueva cuesta de enero que llegará con una subida de las pensiones del 2,6% y después de que el Gobierno haya aprobado un incremento de los sueldos de los funcionarios del 11% entre 2025 y 2028. Falta por concretar la evolución de los sueldos del sector privado en un entorno cada vez más desigual sobre todo por el fuerte incremento del coste de la vivienda. De cara a 2026, el portal inmobiliario Pisos.com espera una subida de más del 10% de los alquileres en el cómputo global del año y del 7,8% para la compraventa.