Primera Air deja miles de pasajeros en tierra tras declararse en quiebra

La aerolínea islandesa Primera Air se ha declarado en quiebra y ha dejado en tierra a miles de pasajeros, que tendrán que buscar sus propias soluciones para el regreso a sus hogares y a los que se les recomienda ponerse en contacto con su aseguradora o agente de viajes para obtener asistencia, en caso de haber hecho la reserva por ese canal.

Hace dos semanas, la aerolínea, con sede en Copenhague aunque de capital islandés, anunció una base en España y vuelos a los EE UU desde Madrid, su cuarta expansión de rutas anunciada en tan solo un mes. La compañía cubria ciudades del norte de Europa (Dinamarca, Suecia, Noruega, Islandia y Reino Unido) con 97 destinos especialmente del sur del continente, entre ellos una decena en España (Barcelona, Madrid, Palma de Mallorca, Alicante, Almería, Málaga, Lanzarote, Fuerteventura, Gran Canaria, Tenerife y La Palma). Según datos de la compañía, daban servicio a 400.000 pasajeros.

"La compañía ha trabajado sin descanso los últimos meses para asegurar una financiación a largo plazo. Ante la incapacidad de alcanzar un acuerdo con nuestro banco para una financiación puente, no tenemos otra opción que solicitar la bancarrota", señaló un comunicado.

La situación financiera de la aerolínea se ha visto afectada por "varios hechos desafortunados imprevistos" los dos últimos años, como la pérdida de un avión por problemas de corrosión y retrasos en la entrega de su nueva flota de Airbud 321 neo.

Primera Air tiene su origen en la aerolínea islandesa Jet X, fundada en 2003 y adquirida cinco años después por el grupo Primera Travel Group, también islandés.